Crítica | Woman of...

|| Críticas | ★★★☆☆

Woman of...

Małgorzata Szumowska, Michał Englert

Quien mucho abarca, poco aprieta

Sara Figueras

Córdoba |

ficha técnica:
Polonia-Suecia, 2023. Título original: Kobieta Z… Directores: Małgorzata Szumowska, Michał Englert. Guion: Małgorzata Szumowska, Michał Englert. Productora: NOMAD Films. Distribución en España: Karma Films. Fotografía: Michał Englert. Música: Jimek. Montaje: Kei Chikaura. Reparto: Małgorzata Hajewska, Joanna Kulig, Mateusz Więcławek, Bogumiła Bajor.

Polonia es uno de los países europeos que, pese a que no considere delito ser queer, todavía carece de derechos suficientes para la comunidad LGBTIQ+. Entre otros, aún no reconoce el matrimonio homosexual ni cuenta con ningún tipo de legislación en cuanto a la identidad de género. En dicho contexto y en torno a este último tema, surge Woman of…, la nueva película del dúo de cineastas polacos Małgorzata Szumowska y Michał Englert, quienes —ahora dentro del género dramático— vuelven a colaborar tras Nunca volverá a nevar (2020) para denunciar la situación de su país en materia de igualdad.

Woman of… retrata 45 años de la vida de Aniela Wesoly —a quien conocemos en la secuencia inicial por su nombre de nacimiento, Andrzej—, una mujer transgénero que, sin salir del armario, crece en un pequeño pueblo de Polonia hasta llegar a formar una vida tradicional junto a su esposa y sus dos hijos, a quienes quiere de corazón. Pero su cotidianidad, aparentemente estructurada, comienza a derrumbarse cuando, a una edad avanzada, decide sincerarse tanto consigo misma como con sus seres queridos e inicia su transición hacia su verdadera identidad, la cual se ve amenazada por el ambiente opresor de un país que, marcado por su herencia comunista y su lenta transición hacia el capitalismo, aún vive en un limbo entre el pasado y el presente.

Si bien la premisa promete una historia emotiva digna de sacarte más de un par de lágrimas, esta se queda a medio camino de conseguir dicho fin al pretender enfocar la temática desde múltiples prismas. La pareja de directores procura plasmar la transexualidad en conflicto con la política, la paternidad, el matrimonio, la religión, la sexualidad, el mundo laboral, la sanidad y la justicia. Todo ello en sus 132 minutos de metraje y otorgándole el mismo peso a cada uno de estos aspectos, dando saltos entre ellos sin ahondar realmente en ninguno, como si se trataran de pequeños esbozos que no consiguen formar una obra sólida y coherente. Ello se traduce en una confusa sensación de estar visionado varias películas a la vez, y todas lejos de la completitud. Asimismo, la manera en la que se exploran todas estas vertientes hace resaltar el carácter didáctico de la narrativa de la cinta. La cualidad cinematográfica queda eclipsada por todo lo que se pretende denunciar y reducida, únicamente, a la belleza de su fotografía —a cargo del también director y guionista Englert—, con unas imágenes que acompañan a las emociones predominantes de la historia, pero que persiguen explotar más lo estético que la crudeza de realidad que se cuenta.

Pese a la falta de focalización, Szumowska y Englert tratan con sensibilidad el tema sobre el que ahondan. Sin embargo, no logran profundizar en demasía. Aniela se define única y exclusivamente por ser transexual. En ningún momento se retrata su personalidad más allá de su identidad de género y el conflicto que ello supone en su vida. Por tanto, es un personaje que se siente, al igual que todos los secundarios que la rodean, como un simple estereotipo que transmite el mensaje que los directores aspiran comunicar al gran público. Todo ello da lugar a una película que, a pesar de estar dirigida al público LGBTIQ+ —como bien se expresa por escrito al final de la misma—, no llega a humanizar del todo su narración. Puede que se trate de un filme necesario —y un avance— para Polonia, cuya intención realmente sea sacudir los corazones de quienes no pertenecen al colectivo y no conocen de primera mano su realidad; sin embargo, desde un enfoque global, la cinta se queda muy atrás en el camino que han ido abriendo obras de la misma temática como es el caso de, por citar un ejemplo reciente, Tangerine (2015) de Sean Baker. A pesar de tener todos lo ingredientes para ello, Woman of… opta por exponer y denunciar la problemática social de un país con un espíritu divulgativo carente de la garra que la temática requiere. De esta forma, el resultado es un filme interesante, visualmente competente, pero demasiado alejado de las necesidades de su presente. ♦