|| Críticas | D'A FILM FESTIVAL 2023 | ★★★★★
La mecánica de
los fluidos
los fluidos
Gala Hernández López
r/náufragos
Júlia Gaitano Mendizábal
ficha técnica:
España, Francia. 2022. Título original: La mécanique des fluides. Dirección: Gala Hernández López. Guion: Gala Hernández López. Producción: L'Heure d'Été, Après les Réseaux Sociaux. Montaje: Alberto Dexeus y Gala Hernández López con la colaboración de Aleix Fernández. Música: Elisa Pereira Martins. Reparto: Documental.
España, Francia. 2022. Título original: La mécanique des fluides. Dirección: Gala Hernández López. Guion: Gala Hernández López. Producción: L'Heure d'Été, Après les Réseaux Sociaux. Montaje: Alberto Dexeus y Gala Hernández López con la colaboración de Aleix Fernández. Música: Elisa Pereira Martins. Reparto: Documental.
La primera pista la encontramos en el nombre del propio subreddit que hospeda dicha nota suicida: r/braincels. El término «incel», comunidad a quién va dedicado ese pedacito de internet, es un acrónimo inglés del término «involuntary celibate», es decir, celibato involuntario. En ese sentido, ver La mecánica de los fluidos es una excelente forma de ponerse al día con algunos de los neologismos y nuevas lógicas que rigen a la juventud, a la red, al mundo. «AnathematicAnarquist», por lo tanto, se encuentra dentro de este grupo de hombres heterosexuales resentidos que se caracterizan por su odio desorbitado hacia las mujeres, hacia los hombres con éxito en el terreno sexual y, en general, hacia el sistema al que culpan por ser así. Hernández empieza a descender por una espiral tenebrosa y compleja. Ventanas y ventanas y ventanas de testimonios incel se nos abren en pantalla, mientras la suave voz en off de de la realizadora nos guía como una antorcha entre tanta oscuridad. Aunque los lugares a los que llega este mediometraje son bastante desesperantes, la directora apunta hacia otras direcciones. A pesar de la misoginia, la rabia y los arranques de estos personajes, se abre la puerta a una posible empatía por ese malestar tan profundo que les revuelve y con el que, a ciertos niveles, la cineasta también se siente identificada.
En cierta manera, La mecánica de los fluidos es un ejercicio sociológico de estas comunidades de hombres solitarios que plagan cada vez más el ciberespacio y los titulares de las noticias cuando, lamentablemente, emprenden acciones violentas hacia sí mismos o hacia los/las demás. Sin embargo, en las manos de Hernández, la pieza supera su carácter analítico cuando la cineasta se inserta a sí misma como un personaje más y se implica en la narrativa en primera persona. Para ello no necesita de imágenes reales, todo lo encuentra en el ordenador y sus interfaces. Los incels se graban contando sus experiencias, otros crean tutoriales para explicar o justificar su opinión sobre los distintos fenómenos, hay quien simplemente es espectador de vídeos en directo de chicas que emiten contenido durmiendo, jugando... para el goce y desespero de nuestros protagonistas. Y más allá de internet, están las imágenes generadas en 3D: como esa isla liminal que le sirve a la cineasta de campamento base desde el cual lanzar ideas. O ese teléfono móvil gigantesco que es una simulación de uno “de verdad”. En su pantalla, una interfaz calcada a la de la aplicación Tinder nos introduce toda una nueva dimensión, en la que estos chicos (y chicas, la directora se incluye en este grupo) que son célibes involuntariamente invierten tiempo, esfuerzos y puede que hasta dinero para revertir su condición. El negocio del amor. Eso, según nos muestra este mediometraje, añade fuelle al abatimiento de figuras como la de «AnathematicAnarquist» que, ante su fracaso, se creen rechazados por todas las mujeres del mundo.
En uno de los últimos recodos de la espiral que es la mecánica de los fluidos, la cineasta intenta interactuar con los participantes del subreddit r/braincels con la esperanza de dar con su protagonista. La reciben, como es habitual en estas esquinitas reactivas de la red, con insultos y burlas. Por lo demás, no son capaces de arrojar luz al misterio de su paradero. Estamos ante uno de los ejemplos mejor ejecutados de actualización del lenguaje audiovisual de los últimos tiempos. Entender el espacio de la pantalla desde sus posibilidades expansivas, no limitadas por lo que, de entrada, le suponemos a una pieza fílmica. La superposición de ventanas, imágenes virtuales, mensajes, notificaciones… O la utilización de parte de esa infinita cantidad de contenido que alberga internet. Todo es material susceptible a tener su sitio en la gran pantalla. Al fin y al cabo, la historia que se cuenta tiene su origen en los mundos virtuales, ¿por qué no debería adoptar entonces sus mismas formas? En las conclusiones del mediometraje, Hernández se pregunta si su carta digital llegará algún día a «AnathematicAnarquist». Creo que, en el fondo, sabe que no es probable que sea así pero, quién sabe, a lo mejor sólo es necesario que llegue a alguien un poco como él. Alguien que, con esta misiva comprensiva, esclarecedora, empática, se sienta visto y escuchado. A lo mejor, con eso, todo habrá servido para algo.