|| Críticas | ★★★☆☆ ½
Las gentiles
Santi Amodeo
Exposición pública
Miguel Martín Maestro
ficha técnica:
España, 2021. Título original: «Las gentiles». Dirección: Santi Amodeo. Guion: Santi Amodeo (con la colaboración de Rafael Cobos). Dirección Fotografía: Álex Catalán. Montaje: José M. G. Moyano, Dario García García. Sonido: Daniel de Zayas, Carlos Pérez Valero, Jorge Marín. Dirección de Arte: Ana Medina. Música: Bronquio. Intérpretes: África de la Cruz, Paula Díaz, Olga Navalón, Lola Buero, Alva Inger, Beatriz Cotobal, Teresa Cruz, Rafa de Vera. Producción Ejecutiva: Daniel Pérez Astiárraga, Gervasio Iglesias. Compañía Productora: Las Gentiles AIE, Grupo Tranquilo PC, Sacromonte Films. Duración: 77 minutos.
España, 2021. Título original: «Las gentiles». Dirección: Santi Amodeo. Guion: Santi Amodeo (con la colaboración de Rafael Cobos). Dirección Fotografía: Álex Catalán. Montaje: José M. G. Moyano, Dario García García. Sonido: Daniel de Zayas, Carlos Pérez Valero, Jorge Marín. Dirección de Arte: Ana Medina. Música: Bronquio. Intérpretes: África de la Cruz, Paula Díaz, Olga Navalón, Lola Buero, Alva Inger, Beatriz Cotobal, Teresa Cruz, Rafa de Vera. Producción Ejecutiva: Daniel Pérez Astiárraga, Gervasio Iglesias. Compañía Productora: Las Gentiles AIE, Grupo Tranquilo PC, Sacromonte Films. Duración: 77 minutos.
Hijas de clases medias venidas a menos, caminantes por una Sevilla alejada del estereotipo, estética de «trap» y de comportamiento desinhibido, en realidad no dejan de ser unas niñas que se creen adultas pero llenas de miedo hacia todo; hacia el amor, el sexo, la vida, las relaciones. Actúan por impulso y por mimetismo; su puerta de expresión más personal, pero también más peligrosa es su perfil social, las gentiles se reivindican como potenciales ausentes, juegan a la desaparición, a pedir opinión sobre qué pasaría si ellas ya no estuvieran, si su alegría en las fotos y filtros de Instagram dejaran de actualizarse, si su sonrisa quedara congelada en un espacio indefinido porque el tiempo se hubiera detenido para siempre. La idea romántica del suicidio del siglo XIX queda huérfana en la película de Amodeo, del amor imposible o del suicidio amoroso; no estamos en los tiempos de von Kleist, o del Werther goethiano. Las gentiles del siglo XXI acarician su idea como una manera de no enfrentarse a una realidad por venir que asusta y agobia porque todo es incierto, oscuro y desmoralizador.
Visualmente la película acompaña con acierto la historia, tratándose del tema que es no se rodea a estas jóvenes de una iluminación tenebrista ni enfermiza, casi al contrario, como una contraposición entre su mente y la realidad, la luz de Andalucía hace aún más incomprensible el devenir de esta pareja que se atrae pero que, en su concepto de una orientación sexual a medio formar, el miedo les impide dar el paso que el deseo exige por si eso equivale a una ruptura definitiva. Las imágenes ayudan a la credibilidad espontánea de las intérpretes, y si bien los adultos quedan relegados a estereotipos de personas derrotadas por la edad y la ausencia de objetivos, son las dos chicas, y la madre de «la Corrales», quienes forman un triángulo atractivo y de absoluto realismo que alcanza su punto culminante en esa escapada hacia el mar que recuerda la sensación de liberación que buscaba también la protagonista de La vida era eso, otra estupenda película española de la temporada, un grupo vital y alegre cuyas sombras permanecen en las miradas cómplices de las dos adolescentes, es un momento de catarsis y aceptación definitiva, pero cada personaje lo asume de manera diferente. Mirada honesta y sin búsqueda de efectismos sentimentales gratuitos, hacia una realidad de la que no se quiere hablar; toda esta juventud perdida, asfixiada por el consumismo y la tecnología enfrentada a la certeza de un futuro precario y sin posibilidad de desarrollo económico que hipoteca su desarrollo personal e incrementa el fantasma de la enfermedad mental. Gran retorno de Amodeo al cine español. ⁜