Fences es una aclamada obra de teatro de August Wilson, sobre el drama de una familia afroamericana en los años 50, estrenada en 1987 y luego en 2010 con el protagonismo entonces de Denzel Washington y Viola Davis: actores y guionista que ahora se han reunido en su adaptación al cine, dirigida por el propio Washington. Este sólo cuenta con dos trabajos anteriores tras las cámaras: The Great Debaters (2007) y Antwone Fisher (2002), dos historias reales rodadas con tino y sin aspavientos, por lo que el célebre intérprete tiene crédito suficiente para trasladar con garantías una pieza cuya esencia es mejor no alterar demasiado. Además ya está familiarizado con ella y no exige grandes despliegues presupuestarios, razón por la cual la productora Paramount ha acelerado su realización para que se estrenara a tiempo de entrar en la carrera por los Óscar este año. Y es que las secuelas de la controversia OscarsSoWhite de la pasada edición juegan a su favor, en una cinta llena de grandes monólogos que colocan tanto a Washington como a Davis a la cabeza de las predicciones en sus respectivas categorías actorales, tanto más teniendo en cuenta que ya han triunfado con estos papeles en el teatro, ganando ambos el Tony. Habrá que esperar en cualquier caso al 25 de diciembre, fecha de estreno en Estados Unidos, para apreciar mejor si la película también puede competir por otras categorías.
