Desde hace unos años, cada estreno del interesante realizador francés Alexandre Aja es esperado con ansias por los aficionados al buen cine de terror. Desde que se alzara con el premio al mejor director en Sitges con su rompedora Alta tensión (2003), dos remakes tan acertados como Las colinas tienen ojos (2006) –para muchos, superior al clásico de Wes Craven– y Piraña 3D (2010) –divertidísima orgía de casquería y chicas en bikini, convertida en clásico camp instantáneo–, o las reivindicables Reflejos (2008) y Horns (2013), Aja ha demostrado saber pulsar como pocos las teclas para ofrecer miedo con cierta calidad. Con The 9th Life of Louis Drax (2016), vuelve a incidir en el género, adaptando una popular novela homónima de Liz Jensen que cuenta la historia de Louis Drax, un niño que, en su corta vida, ha estado al borde de la muerte hasta en ocho ocasiones debido a extrañas circunstancias. Cuando un último accidente deja al chaval en coma, el psicólogo Allan Pascal comienza a tratarle, embarcándose en la resolución de un misterio en el que realidad y fantasía conviven de la mano, al tiempo que se implica sentimentalmente con la madre de Louis. Max Minghella, hijo del director Anthony Minghella y actor visto en títulos como Ágora (Alejandro Amenábar, 2009) o La red social (David Fincher, 2010), debuta como guionista con este trabajo protagonizado por un Jamie Dornan que trata de escapar de ese encasillamiento como guaperas de moda que le amenaza a raíz de la efusiva acogida (popular, que no crítica) de su papel del sadomasoquista Christian en Cincuenta sombras de Grey (Sam Taylor-Johnson, 2015). Sarah Gadon, Aaron Paul, Barbara Hershey y Oliver Platt secundan a la emergente estrella en este thriller sobrenatural producido y distribuido por Lionsgate que verá la luz el próximo 2 de septiembre en las salas norteamericanas.