Después de la división de opiniones despertada por su último trabajo, el western indie Jane Got a Gun (2016), el director Gavin O´Connor encuentra en el thriller El contable (The Accountant, 2016) una nueva oportunidad para recuperar el crédito ganado con la excelente (y nunca suficientemente valorada) Warrior (2011). Protagoniza un Ben Affleck que cada vez parece más dispuesto a enterrar su imagen de actor mediocre e inexpresivo. Una seña de identidad, esta última, que ha sabido utilizar en su beneficio, en dos de sus trabajos más recientes y aclamados: Perdida (David Fincher, 2014) y Batman v. Superman: El amanecer de la Justicia (Zack Snyder, 2016) –de la que salió bastante airoso en su encarnación del hombre murciélago, a pesar de las desastrosas críticas que sufrió la cinta–, y que le puede valer para convertir a este Christian Wolff en uno de los personajes más interesantes de su carrera, y, de paso, callar a quienes aún cuestionan su talento interpretativo. Bill Dubuque –El juez (David Dobkin, 2014)– es el encargado de escribir la historia de un contable que trabaja para el gobierno en una pequeña oficina. Maniático y todo un genio de las matemáticas, esconde, sin embargo, una doble vida que le lleva a trabajar por las noches para importantes organizaciones criminales, blanqueando dinero e, incluso, ejerciendo de frío asesino. O´Connor ha apostado fuerte poniendo a Affleck en la piel de este tipo antisocial y víctima de una adolescencia difícil que le hizo refugiarse en los números para huir de las personas. Un auténtico bombón que, en buenas manos, podría ser carne de nominaciones. Anna Kendrick, J.K.Simmons, John Lithgow, Jeffrey Tambor y Jon Bernthal secundan a la estrella en esta apuesta de Warner Bros. que llegará a los cines de Estados Unidos el 14 de octubre. (Póster oficial)
