«Es una película sobre la guerra, pero ante todo sobre la vida». Así justificaba el jurado del Festival Internacional de Murcia la elección de Homeland (Iraq Year Zero) como mejor película del certamen.
El iraquí Abbas Fahdel, con su segunda película, el documental Homeland (Irak Year Zero), que muestra la horrible cotidianidad de la guerra en terreno persa, se ha alzado como gran triunfador de la séptima edición del IBAFF. El jurado conformado por Pedro Ortuño, Gonzalo Ballester, Abraham Hurtado, Khristine Gillard, Kevin Senant y Valentine Siboni no ha tenido ninguna duda a la hora de defender su postura aunque fuese el último filme presentado en la Sección Oficial: «Siendo una película de casi 6 horas de duración, nos introduce dentro de la vida, con el ritmo propio y verdadero de la vida real. Sutilmente, pacientemente, sumergiéndonos en una experiencia física, nos adentra en una historia que poco a poco deja de ser la historia de otros para convertirse en nuestra propia historia. Una historia que no sólo nos habla sobre el pasado sino que está íntimamente conectada con nuestro mundo actual. Sobre la fe, la pérdida y la esperanza. ‘Homeland’ es una película que recordaremos. Es un documento de inmenso valor, pero es más que eso, es parte de la Historia, la Historia de un país pero también la historia de la humanidad. Una película imprescindible». La cinta The Iron Ministry, filmada durante 3 años en las vías ferroviarias de China por J. P. Sniadecki, logró la Mención Especial del Jurado. Los miembros del jurado han detallado su elección especificando las sensaciones que les evoca la propuesta asiática: «Nos envuelve en una sensación constante de movimiento a través de un viaje sin final por un país que evoluciona vertiginosamente. Como espectadores, encontramos nuestro camino a través de los diferentes compartimentos y clases en distintos trenes, donde temas sociales y políticos van surgiendo de forma natural a medida que nos adentramos en conversaciones entre los pasajeros. Yendo más allá del retrato, ‘The Iron Ministry’ nos adentra en un mural humano y tecnológico». Del resto del palmarés, destaca el entorchado a mejor cortometraje para Tres corderos, del canario David Pantaleón; los galardones del jurado popular para Muros, de Pablo Iraburu y Migueltxo Molina, como mejor largo, y la francesa Fils du loup, de Lola Quivoron, como mejor corto; el Premio IBAFF Joven que fue a parar a la pieza La propina, de Esteban Crespo; el Premio En Construcción ha sido concedido a la belga Khristine Gillard. Por último, Pere Portabella ha recibido el Premio Honorífico de esta edición, subrayando en su discurso de entrega el «carácter abierto e inclusivo del festival en base a propiciar encuentros entre el público, los creadores y directores de diferentes partes del mundo con una gran capacidad de participación que avalan la proyección de películas procedentes de más de veinte países de distintos continentes». Con el cuadro de honor, por tanto, concluyen trece días de gran cine en la capital murciana; un evento que pese a las estrecheces de los últimos año sigue demostrando que es uno de los bastiones del cine de autor y experimental en la península.