Estreno en España y Estados Unidos: 6 de noviembre.
Sin duda, uno de los grandes aciertos de cásting de los últimos años ha sido la elección del actor británico Daniel Craig para tomar el relevo del gentleman Pierce Brosnan en la piel del agente 007 con licencia para matar James Bond, creado por Ian Fleming. La rudeza de Craig trajo nuevos aires a una saga que con Casino Royale (Martin Campbell, 2006) llegaba a su episodio número 21, convirtiéndose en una de las mejor recibidas por la crítica y en todo un bombazo comercial. Tras un ligero bajón con la, no obstante, estimable Quantum of Solace (Marc Foster, 2008), Sam Mendes se sentó en la silla del director para rodar Skyfall (2012), el filme más exitoso de la serie gracias a los 1.108 millones de dólares que lo colocan en el puesto 12 de las películas más taquilleras de la Historia. Los medios se deshicieron en elogios hacia ella, resaltando especialmente la magnífica fotografía del gran Roger Deakins y la labor de un magnífico Javier Bardem como villano de altura. Desde luego, el listón está altísimo para Spectre (2015), el capítulo 24 de las aventuras de James Bond.
Las buenas noticias son que repite Sam Mendes en la dirección y que las primeras imágenes del tráiler prometen acción de calidad, que da prioridad al suspense por encima de las escenas espectaculares (que, seguro, no faltarán), fórmula que tan bien funcionó en Skyfall. Hoyte van Hoytema sustituye a Deakins en la fotografía con un acabado sobrio y elegante, mientras que la música vuelve a correr a cuenta de Thomas Newman, tras su excelente partitura en el filme anterior. El siempre intenso Christoph Waltz será el encargado de ser el principal enemigo de Daniel Craig en esta ocasión, así como las habituales chicas Bond (después de que la M de Judi Dench robara todo el protagonismo en la anterior entrega) estarán encarnadas por un trío de actrices verdaderamente envidiable: Mónica Bellucci, Léa Seydoux —excelente protagonista de La vida de Adèle (Abdellatif Kechiche, 2013)— y Naomie Harris, que retoma su personaje de Moneypenny. También vuelven Ralph Fiennes como el nuevo M y Ben Whishaw como el armero Q. Un excelente reparto para una cinta que narrará la lucha de Bond contra la siniestra organización SPECTRA, aquella que ya apareciera en los tiempos de la clásica Operación Trueno (Terence Young, 1965) con Sean Connery en la piel de 007. Una estupenda forma de celebrar el 50 aniversario de aquella película y, sin duda, una de las citas más esperadas de la cartelera cinematográfica invernal.