Islandia también existe
Palmarés de Un Certain Regard 2015
Algo que gritan con cada vez más fuerza, refiriéndonos al título de este artículo, autores como Rúnar Rúnarsson, Hafsteinn Gunnar Sigurðsson, Baltasar Kormákur o Benedikt Erlingsson en festivales del último lustro. En un apartado con cineastas como Apichatpong Weerasethakul, Corneliu Porumboiu, Radu Muntean, Roberto Minervini o Naomi Kawase, tiene mucho mérito el triunfo del filme de Grímur Hákonarson. Con el añadido de que la segunda película del cineasta nórdico había pasado bastante desapercibida entre la crítica, reuniendo opiniones no demasiado entusiastas sobre esta historia de amistad con carneros de por medio. Si el año pasado la victoria tuvo a perros como protagonistas gracias a la magiar White God, este año es el macho de la oveja el leitmotiv de una fábula dramática muy en la línea de la laureada De caballos y hombres (2013), del nombrado Benedikt Erlingsson. A destacar las victorias de Kiyoshi Kurosawa (Mejor dirección) y Corneliu Porumboiu (Premio al talento); este último sorprendió al público esta semana con la estupenda The Treasure, una versión contemporánea de Robin Hood que rompe con los habituales axiomas del cine rumano. La filmografía del realizador de Vaslui es toda una oda a la ruptura de patrones. Un cineasta a reivindicar. La cinta de Porumboiu, junto a la de Weerasethakul, Cemetery of Splendour, ha sido, para la mayoría de acreditados, el mejor largometraje de Un Certain Regard. Para finalizar el repaso al palmarés, citar que la croata Zvizdan, historia de amor dividida en tres décadas, se llevó el Premio del Jurado para celebrar su distribución en Francia gracias a Bac Films. Ojalá también tenga hueco en España.