Premios Feroz 2015

La segunda edición de los premios de los informadores de cine se ha cerrado sin sorpresas excesivas, pero con un par de necesarios toques de atención a la Academia. Como cabía esperar, Magical Girl y La isla mínima se han repartido los honores. De hecho, a la hora de entregar el máximo galardón de la noche, ambas poseían cuatro merecidos galardones: guion, actriz (Bárbara Lennie), actor de reparto (José Sacristán) y cartel para la primera; dirección, actor (Javier Gutiérrez), música y tráiler para la segunda. Finalmente, el thriller de Alberto Rodríguez se hizo con el premio a mejor película dramática, postulándose como clara favorita para los Goya. Y, hablando de los Goya, dos excelentes trabajos ni siquiera nominados para el mismo destacaron ayer en sus respectivas categorías. Se trata, por supuesto, de Itziar Aizpuru, reconocida por su maravillosa interpretación secundaria en Loreak en representación de toda la película, y de Carmina y amén, designada como mejor comedia, un género que sigue estando tristemente infravalorado, tal y como afirmó el emocionado Paco León al recibir el galardón como guionista, director y productor de la obra. En contraposición, dos excelentes films —un drama y una comedia— se fueron con las manos vacías a falta de categorías revelación: la minimalista 10.000 km y la taquillera Ocho apellidos vascos.

Que Aizpuru y Sacristán hayan triunfado como mejores intérpretes secundarios no ayuda a esclarecer las incógnitas de dichas categorías de cara a los Goya, pero Gutiérrez y Lennie sí parecen tenerlas todas consigo de cara al máximo galardón del cine español (si bien ella deberá enfrentarse a la magistral Macarena Gómez, cuya Musarañas ha sido involuntariamente ignorada en los Feroz a raíz de su tardío estreno). En cualquier caso, el año pasado sólo hubo tres coincidencias entre estos galardones y los premios de la Academia, con lo que su denominación como ‘antesala de los Goya’ es todavía más anecdótica que estricta. Con los Forqué, los San Jordi y los Feroz entregados, ya sólo queda esperar un par de semanas para la ceremonia de los Goya más competitiva y emocionante que se recuerda. Los lobos ya han aullado sus preferencias. | Juan Roures (Madrid).