La mafia uccide solo d’estate, Pierfrancesco Diliberto (Italia, 2013)
Mostra de Cine Italiano de Barcelona (MCIB) 2014 / ★★★★
Situémonos en 2008, en pleno boom anti-Mafia del cine italiano. A competición oficial del Festival de Cannes no sólo se presentan dos películas sobre el mismo tema, sino que una se lleva el Gran Premio del Jurado y la otra la Mención Especial. Los dos largometrajes en cuestión son Gomorra (2008) de Matteo Garrone e Il Divo (2008) de Paolo Sorrentino. El primero es un retrato sobre la sociedad napolitana que vive bajo el yugo de la Camorra. El segundo una recreación casi onírica —al particular estilo de Sorrentino— de la figura de Giulio Andreotti, personaje público que pese a sus siete mandatos como Primer Ministro de Italia siempre vivió rodeado de acusaciones sobre su hipotética implicación con la Cosa Nostra. Ese mismo año ambos films arrasan en la entrega de premios de la Academia de Cine Europeo. Gomorra obtiene los galardones de Mejor Película, Mejor Director, Mejor Guión y Mejor Fotografía. Asimismo, el actor Toni Servillo es doblemente premiado con la Mejor Interpretación Masculina por su personificación de Giulio Andreotti en Il Divo y por su rol de despiadado mafioso en Gomorra. Pero, entonces, regresa Silvio Berlusconi al poder y se hace el silencio hasta que, siete años después, Pierfrancesco Diliberto consigue romper la censura cinematográfica y mediática que ha padecido Italia entorno a la citada cuestión.
Diliberto, conocido en el mundo de la televisión con el alías “Pif”, ha dirigido la inteligente comedia satírica La mafia sólo mata en verano, un largometraje que no podría haberse realizado en pleno berlusconismo. Una cinta que no llegó a Cannes como su predecesoras pero, tras alzarse con el Premio del Público en el Festival de Turín, la Academia de Cine Europeo también tuvo en cuenta su valía y en diciembre la eligió Mejor Comedia de 2014. La opera prima de Pierfrancesco Diliberto repasa la política italiana de los años setenta, ochenta y noventa; la cual tuvo que enfrentarse a una creciente e imparable actividad mafiosa. Sin embargo, la denuncia pública que Pif expone en su película no va dirigida al gobierno corrupo o a los asesinos a sueldo. La Mafia sólo mata en verano es una crítica a la sociedad siciliana de la época que, por culpa de su ciega pasividad, favoreció la expansión de la Cosa Nostra. El debut de Diliberto es una radiografía sobre la mentalidad siciliana de la época. Se trata de una comunidad que en treinta años pasó por tres fases distintas. Primero negó la existencia de la Mafia, después justificó todas sus acciones por miedo a las posibles represalias, y finalmente se manifestó en contra de ésta a partir de los noventa. La generación de Pif es la de los niños que sobrevivieron al Palermo de los coches bomba y los tiroteos en plena calle, la que creció con las mentiras que sus padres les contaban para que no se asustaran. Falsos mitos como el que da nombre al largometraje.
Diliberto, conocido en el mundo de la televisión con el alías “Pif”, ha dirigido la inteligente comedia satírica La mafia sólo mata en verano, un largometraje que no podría haberse realizado en pleno berlusconismo. Una cinta que no llegó a Cannes como su predecesoras pero, tras alzarse con el Premio del Público en el Festival de Turín, la Academia de Cine Europeo también tuvo en cuenta su valía y en diciembre la eligió Mejor Comedia de 2014. La opera prima de Pierfrancesco Diliberto repasa la política italiana de los años setenta, ochenta y noventa; la cual tuvo que enfrentarse a una creciente e imparable actividad mafiosa. Sin embargo, la denuncia pública que Pif expone en su película no va dirigida al gobierno corrupo o a los asesinos a sueldo. La Mafia sólo mata en verano es una crítica a la sociedad siciliana de la época que, por culpa de su ciega pasividad, favoreció la expansión de la Cosa Nostra. El debut de Diliberto es una radiografía sobre la mentalidad siciliana de la época. Se trata de una comunidad que en treinta años pasó por tres fases distintas. Primero negó la existencia de la Mafia, después justificó todas sus acciones por miedo a las posibles represalias, y finalmente se manifestó en contra de ésta a partir de los noventa. La generación de Pif es la de los niños que sobrevivieron al Palermo de los coches bomba y los tiroteos en plena calle, la que creció con las mentiras que sus padres les contaban para que no se asustaran. Falsos mitos como el que da nombre al largometraje.
El encanto de La mafia sólo mata en verano se identifica con el enfoque que adopta este ambicioso proyecto. El pequeño Arturo (Alex Bisconti) es el encargado de personificar el devenir y la evolución psicológica de la comunidad siciliana mediante una sutil metáfora. En el primer gag se representa la noche de bodas de los padres de Arturo mientras tiene lugar una matanza sanguinaria en la misma calle. Desde el momento de su concepción, la existencia de Arturo —igual que la de todos los ciudadanos de Palermo— se verá influida y condenada por las actividades paralelas de la Mafia. Además, a lo largo de su vida, el destino facilita al protagonista azarosos encuentros con miembros del gobierno, jueces y policías que posteriormente son ejecutados. En otras palabras, todas las relaciones entre la política italiana y la Cosa Nostra marcan la infancia y la adolescencia de Arturo. La mafia sólo mata en verano está narrada a través los ojos de un niño que confunde la realidad con la imaginación. El director se apropia del tono naif de Forrest Gump (1994) sin perder el propósito crítico. La hilarante comedia de Pif no sólo divierte al espectador, sino que también remueve su conciencia social al añadir la recreación exacta de los crímenes que atemorizaron a la población de Palermo en aquellos tiempos. Los homicidios de Boris Giuliano, Rocco Chinnici, Carlo Alberto Dalla Chiesa, Pio la Torre, y más tarde los de Giovanni Falcone y Paolo Borsellino son ridiculizados con un humor negro que no parece de procedencia italiana. En este sentido, la caricatura más osada del film es la de la figura de mayor poder de ese momento: la de Giulio Andreotti. El original guión de La mafia sólo mata en verano ofrece un magnífico homenaje a Il Divo de Paolo Sorrentino, el cual se hace evidente cuando el pequeño protagonista se disfraza de Andreotti en el carnaval de la escuela. Arturo viste y camina como Toni Servillo en Il Divo, no como el auténtico líder. Por otro lado, el cineasta construye una alegoría sobre la relación entre los votantes italianos y Andreotti a través de la obsesión del menor de edad por el Primer Ministro. Dicho vínculo de dependencia no llega a la seriedad de la unión entre la protagonista de Viktoria (2014) y el tirano Todor Zhivkov, sin embargo en ambos largometrajes los infantes acaban desilusionándose al conocer la verdad sobre la idolatrada figura paterna que habían creado: en el caso de Viktoria por la caída del comunismo en Bulgaria y en La mafia sólo mata en verano por las posibles conexiones de Giulio Andreotti con la Mafia. | ★★★★★ |
Carlota Moseguí
Enviada especial a la Mostra de Cine Italiano de Barcelona
Ficha técnica
Italia, 2013, La mafia uccide solo d’estate. Director: Pierfrancesco Diliberto. Guion: Michele Astori, Marco Martani, Pierfrancesco Diliberto. Productora: Wildside. Fotografía: Roberto Forza. Música: Santi Pulvirent. Montaje: Cristiano Travaglioli. Presentación oficial: Sección oficial del Festival de Torino 2013. Premios: Mejor comedia en los European Film Awards 2014. Reparto: Cristiana Capotondi, Pierfrancesco Diliberto (AKA Pif), Ginevra Antona, Alex Bisconti, Claudio Gioè, Ninni Bruschetta, Barbara Tabita, Rosario Lisma.