El TIFF 2014 llega a su fin y los resultados impresionan. No por inesperados, sino porque en parte confirman la tendencia de Toronto a destacar lo más oscarizable, independientemente de otras propuestas más valientes. De este extraño palmarés, nos quedamos con el segundo lugar que ha conquistado Isabel Coixet. Una Learning to Drive que se siente necesaria para la revitalización de una filmografía que en sus dos últimas incursiones había despertado mucha indiferencia (pese a que en el TIFF hubiera algún que otro defensor de Ayer no termina nunca). Nos sorprende, también, cómo se ha organizado la gala de entregas: un brunch abierto a todos los medios, ticket mediante, en el que nos servían una copa de zumo de naranja con vino gaseado, yogur con cereales y frutas, bollería de diverso tipo, y, para comer, carne y repostería fina. El ambiente, distendido, nos ha permitido cerrar esta edición del TIFF con buenas sensaciones a pesar de lo amargo de la resolución, donde ni Xavier Dolan, ni James Marsh, han conseguido mención alguna. A Dolan, por desconocimiento, cumpliéndose más que nunca el dicho de que nadie es profeta en su tierra; y a Marsh, difícil saberlo. Parece que la propuesta de Tyldum ha cuajado más entre el público americano, aunque The Theory of Everything posee bastante más elegancia.
Pero como no todo (aunque lo parezca) es cine, nos quedamos con los asientos reclinables del Scotiabank Theatre, los burritos que podían adquirirse en los quioscos del mismo cine, la experiencia del IMAX sin IMAX (pues no nos lo habilitaron ni para un solo pase) y la comodidad de la disposición de los estrenos. Apenas hemos tenido que movernos un par de veces, pudiendo visitar el impresionante teatro del Winter Garden, donde plantas artificiales cuelgan del techo; y la animada sesión nocturna del Midnight Madness con The Guest, con la que ayer despedíamos el día entre un público entregado, de esos que aplauden y ríen a cada muerte y cada puñalada. La sensación final es de desenfado. De que el TIFF es un festival que busca empatar con el espectador de a pie más allá de las coberturas. Y eso hace que gane en naturalidad y sencillez. Ha sido una gran cita de cine, y una tremenda experiencia que, espero, vuelva a repetirse en el futuro TIFF 2015.
Pero como no todo (aunque lo parezca) es cine, nos quedamos con los asientos reclinables del Scotiabank Theatre, los burritos que podían adquirirse en los quioscos del mismo cine, la experiencia del IMAX sin IMAX (pues no nos lo habilitaron ni para un solo pase) y la comodidad de la disposición de los estrenos. Apenas hemos tenido que movernos un par de veces, pudiendo visitar el impresionante teatro del Winter Garden, donde plantas artificiales cuelgan del techo; y la animada sesión nocturna del Midnight Madness con The Guest, con la que ayer despedíamos el día entre un público entregado, de esos que aplauden y ríen a cada muerte y cada puñalada. La sensación final es de desenfado. De que el TIFF es un festival que busca empatar con el espectador de a pie más allá de las coberturas. Y eso hace que gane en naturalidad y sencillez. Ha sido una gran cita de cine, y una tremenda experiencia que, espero, vuelva a repetirse en el futuro TIFF 2015.
Menciones
Tusk
Dirigida por Kevin Smith.
Reparto: Justin Long, Haley Joel Osment, Genesis Rodriguez, Michael Parks.
Estados Unidos, 2014
MIDNIGHT MADNESS
Porque ha sido la Relatos salvajes de este TIFF 2014. Una película desfasada que provoca la risa y el sobresalto. Porque Kevin Smith no ha perdido su toque de humor pop de continuas referencias. Por la progresiva absurdez de su trama, que va descubriendo sus cartas poco a poco. Por un casting que, en su excentricidad, es muy divertido. Por el regreso de un Haley Joel Osment al que los años no le han pasado en balde; y por ese Johnny Depp irreconocible. Por sus bromas a Canadá, que siempre da mucho juego y porque, aún con su tontería, consigue dar mal rollo. Por un final que no se corta y porque, en el fondo, no es más que una gran broma que el director se ha marcado con sus fans. Una de las películas con las que más sesiones de cine nocturnas entre amigos se harán este año.
Return to Ithaca
Dirigida por Laurent Cantet.
Reparto: Isabel Santos, Jorge Perugorria, Fernando Hechevarria, Nestor Jimenez.
Francia, 2014
SPECIAL PRESENTATIONS
Por ese guión al que poco se puede cuestionar. Por saber plasmar esas nostálgicas conversaciones sobre el pasado de Cuba con una naturalidad que conmueve. Por sus actores, que consiguen entrar en la dinámica con mucha facilidad ayudados por la dirección valerosa y nada intrusiva de Cantet. Porque, a pesar de ser un filme que exige atención máxima por parte del espectador, recompensa fijándose en la memoria. Por esos momentos musicales tan bien escogidos, donde California Dreamin’ o Mediterráneo se convierten en himnos inmediatos. Por ese comienzo con Eva María de Formula V Por su teatralidad, que podría pasar por ser representada en un escenario. Y por un final nostálgico, que deja una enorme huella.
Las 10 mejores películas del TIFF 14
10| Phoenix
Dirigida por Christian Petzold.
Reparto: Nina Hoss, Ronald Zehrfeld.
Alemania, 2014
SPECIAL PRESENTATIONS
Por ser la película alemana del año y una de las historias de amor más crueles y mejor dirigidas de cuentas hemos visto en el TIFF. Por el acierto y la distancia con la que Alemania sabe contar sus guerras sin resultar juiciosa ni aleccionadora. Por esa transformación física de Nina Hoss que remite a la Kim Novak de Vértigo. Por ese final inapelable que no necesita de epílogos para cerrar la narración en el mismo clímax dramático. Por su tenebrosa atmósfera nocturna. Y, por esa última canción.
09| Hungry Hearts
Dirigida por Saverio Costanzo.
Reparto: Adam Driver, Alba Rohrwacher, Roberta Maxwell.
Italia, 2014
SPECIAL PRESENTATIONS
Por erigirse como una de las pesadillas cotidianas más claustrofóbicas de todo el TIFF. Por ese trabajo de cámara arriesgado y brillante que, a través de la deformación de los espacios y los rostros, sabe como contagiar al público de una tensión creciente que estalla en un clímax bien cerrado. Por lo despiadado de su argumento, que desarrolla una inocente historia de amor para convertirla en un pulso de control paterno que pone muy nervioso. Por su maravilloso comienzo en un plano fijo de cinco minutos que sabe como captar la comicidad instantánea de la pareja. Y, no podíamos olvidarla, por esa Alba Rohrwacher escalofriante que da una lección de cómo inquietar en pantalla. Por eso, y por conseguir mantener la imprevisibilidad del guión, Hungry Hearts debe ser uno de los largometrajes del 2014... o 2015.
08| The Keeping Room
Dirigida por Daniel Barber.
Reparto: Brit Marling, Hailee Steinfeld, Sam Worthington, Muna Otaru, Kyle Soller.
Estados Unidos, 2014
SPECIAL PRESENTATIONS
Porque, siendo una oferta aparentemente menor, entrega un ejercicio de Western con cuatro elementos que mantiene la tensión en pie durante la hora y media que dura. Porque el enérgico trabajo de Brit Marling. Por su falta de pretensiones y su discurso feminista, que recuerda al Tarantino de Death Proof. Por su acertado casting y un guión que, a pesar de sus últimos giros algo cogidos con pinzas, soluciona bien el entuerto. Pero, ante todo, porque es un divertimento de primer nivel.
07| Nightcrawler
Dirigida por Dan Gilroy.
Reparto: Jake Gyllenhaal, Bill Paxton, Rene Russo, Riz Ahmed.
Estados Unidos, 2014
SPECIAL PRESENTATIONS
Porque habiendo varios thrillers de acción de peso en el programa, Nightcrawler ha sido, de lejos, el más intenso y crítico de todos. El que más daño hace y de los mejor dirigidos. Porque Dan Gilroy sabe captar el pulso nocturno de Los Ángeles sin que le tiemble la mano. Por las acertadas elecciones de Jake Gyllenhaal y René Russo. Él entregando un personaje despiadado y psicopático. Y ella dándole la réplica, en un dúo que funciona mejor de lo que uno esperaría. Por el retrato tan cínico que se da de la nula moral de la televisión. Y por descubrir a un gran director en potencia.
06| EL RUIDO Y LA FURIA
The Sound and the Fury.
Dirigida por James Franco.
Reparto: Jon Hamm, James Franco, Joey King, Dave Franco, Seth Rogen.
Estados Unidos, 2014
SPECIAL PRESENTATIONS
Porque aunque no sea perfecta y James Franco se tome muchas licencias interpretativas al hacer suyo el personaje de Benji, el más delicado de todos, el conjunto transmite pasión narrativa y muestra a un autor con visión propia, algo deudora del último Terrence Malick, pero con fuerza suficiente para conmover sin trampas. Por ese primer capítulo que remueve. Por una lírica y apartado visual que calan hondo. Y porque, a pesar de tomarse libertades respecto al espíritu árido de la novela, Franco ha sabido hacer suyo el relato, entregando una obra que funciona y que está destinada a ser un clásico de culto.
05| Gemma Bovery
Dirigida por Anne Fontaine.
Reparto: Gemma Arterton, Fabrice Luchini, Jason Flemyng, Niels Schneider.
Francia, 2014
SPECIAL PRESENTATIONS
Por ser la película más divertida del TIFF y la que más sorpresa en el balance expectativas-realidad. Por la sensual e hipnótica interpretación de Gemma Arterton. Por ese tono ligeramente francés que juega al metalenguaje literario de una forma similar a la de Ozon en En la casa. Por el acierto de su guión, escrito con gusto y que sabe buscar la complicidad del espectador sin problemas. Por Fabrice Lupini, que, aunque hace un trabajo deudor del citado filme de Ozon, es llave del funcionamiento del cuento bucólico de Fontaine. Y, más que nada, por erigirse como una de versiones más inspiradas que hemos visto del clásico de Flaubert, superando por mucho a la solemnidad de Sophie Barthes en la también presentada aquí Madame Bovary.
04| The Theory of Everything
Dirigida por James Marsh.
Reparto: Eddie Redmayne, Felicity Jones, Emily Watson, David Thewlis.
Reino Unido, 2014
SPECIAL PRESENTATIONS
Porque con una apuesta tan recurrente y poco original como es abordar el biopic de un genio, James Marsh ha sabido dirigir un filme de elegancia incuestionable, emotivo pero que no carga las tintas más de la cuenta, y que le otorga a Eddie Redmayne y a Felicity Jones el trampolín definitivo para que ambos jóvenes acaben saltando al estrellato de una vez por todas. Por quitarnos a algunos las dudas que teníamos sobre las capacidades de este joven actor londinense que se mimetiza de una forma increíble en la progresiva decadencia de Stephen Hawking. Por eso, y también por su preciosa banda sonora firmada por el sueco Jóhan Jóhansson, defiendo The Theory of Everything como una de esas apuestas comerciales que tratan al público con respeto, sin manipularlo como sí ha hecho la ganadora del Premio del Público: The Imitation Game.
03| The Riot Club
Dirigida por Lone Scherfig.
Reparto: Sam Claflin, Max Irons, Douglas Booth, Jessica Brown Findlay, Holliday Grainger.
Reino Unido, 2014
GALAS
Por su apuesta de mostrar algo tan desagradable sin juicios superficiales. Por su fina dirección, fiel a al estilo de su nacionalidad. Por la buena elección de casting, que sabe transmitir la altivez de ese grupo elitista de estudiantes. Pero, sobre todo, por una escena concreta que acontece en un restaurante que se alarga hasta alterar por completo nuestro sistema nervioso. Toda una transmisora de sensaciones (en este caso, negativas).
02| La señorita Julia
Miss Julie.
Dirigida por Liv Ullmann.
Reparto: Jessica Chastain, Colin Farrell, Samantha Morton.
Reino Unido, 2014
SPECIAL PRESENTATIONS
Por su fuerte apuesta dramatúrgica. Por una Jessica Chastain que una interpretación brutalmente intensa. Por la dirección tan clásica pero, al mismo tiempo, tan arriesgada de Liv Ullman, que apuesta por mantener la esencia de un escenario limitando al máximo la intrusión del montaje y dejando todo el peso a sus actores. La cineasta noruega se atreve con una obra de 1888 sin tomarse licencias modernas, y que, de forma progresiva, aumenta su intensidad hasta llegar a extremos de hipnótico patetismo. Una propuesta que no da concesiones al público. Por todo ello, la señora Ullmann ha sido una de mis favoritas de este TIFF 2014.
01| EDEN
Dirigida por Mia Hansen-Løve.
Reparto: Félix De Givry, Pauline Etienne, Vincent Macaigne, Greta Gerwig.
Francia, 2014
SPECIAL PRESENTATIONS
Porque, a pesar de ser un filme en el que parece no tener una línea narrativa clara, Mia Hansen-Løve ha sabido contar, a partir de la Historia de la Música House francesa de principios de los 90, la evolución y el progresivo desencanto de toda una generación de jóvenes europeos a lo largo de los últimos 20 años. Porque es suficientemente inteligente como para no entrar en temas políticos, centrándose en el ánimo vitalista y triste que transmiten sus temas, las raves del 95, y las responsabilidades del 2001. Por su sutilidad a la hora de mostrar el cambio de actitud y la crisis económica. Por su atmósfera de aparente nadería y vacío que, en realidad, es pura crónica a través de un grupo como Daft Punk que ha sabido adaptarse a las nuevas corrientes superando su anterior éxito. Por los maravillosos cameos de Greta Gerwig y Golshifteh Farahani. Por eso, y por su final, que sabe enclaustrar el sentimiento de dos décadas en un solo verso. La mejor película del Festival de Toronto y, quizás, la de Donostia Zinemaldia. Lo sabremos en unos días.
Gonzalo Hernández
Enviado especial al Festival de Toronto 2014