Mostra de Venecia 2014 | Palmarés. Roy Andersson, León de Oro

Justicia poética en el Véneto

Palmarés de la 71ª edición de la Mostra de Venecia

No pasará a la Historia la 71ª edición de la Mostra de Venecia. Como tampoco han pasado las últimas dos ediciones. El cine presentado en el Lido sólo ha dejado detalles. Vueltas anónimas con cine arriesgado. Eso sí, a cuentagotas. Cuesta mucho hacer una selección de 10 películas —que, por otra parte, mañana tendrán en EAM— destacadas, de citar a algún título de los que hemos hablado durante esta semana como futuro protagonista. Esta Venecia huele a seco, huele a que se ha quedado sin ideas. Ni Marco Müller, ni Alberto Barbera pueden resucitar a un certamen que ha perdido tanto terreno como brillo su ciudad. Sólo quedan apuntes y vanos recuerdos. El 71 será el número mágico del ganador del León de Oro, Roy Andersson, otrora aspirante a suceder a Bergman y caudillo de un estilo que jamás pasará de moda; lo será también para Adam Driver y Alba Rohrwacher, los protagonistas de Hungry Hearts. El primero, porque demuestra en cada producción una tracción que no entiende de géneros. La segunda, se ha convertido ya en una musa. Pronto la veremos con los grandes; el 71 significará el recuerdo del segundo paso de un valiente, Joshua Oppenheimer, que clava la cámara donde otros no quieren mirar; o la vuelta de un dinosaurio, Andréi Konchalovsky, que ha visto el siglo XX pasar y dejará un legado que no entenderá de espacio-tiempo. Detalles, sólo detalles. La importancia la marcará Cronos. Aunque mucho me temo que, salvo mediar un movimiento tectónico inusual por el Adriático, todo seguirá igual el año que viene. Venecia, todo un lujo, sin sitio. Ni cine comercial, ni cine experimental... autores con las mismas historias, leones con una larga melena que no les permite ver el sol.