Walter White edulcorado
crítica de After the Fall | de Saar Klein, 2014
No es casualidad que Saar Klein coloque el nombre de Terrence Malick en la primera línea y en solitario en el apartado reservado a los agradecimientos. El montador de películas como El nuevo mundo y La delgada línea roja tiene muchos puntos en común con el director de Illinois. Sin embargo, está más cerca del Malick de las primeras películas que de la solemnidad profunda y filosófica del último Malick con El árbol de la vida y To the wonder. Klein se lanza a dirigir su primera película con las cosas muy claras a nivel formal. Desprendiéndose del excesivo artificio ceremonioso de su maestro, nos presenta una cinta mucho más digerible y cercana. La sencillez en su puesta en escena y la clara identificación del protagonista y sus medios se transmite a través de una cámara de movimientos suaves, sin estridencias ni planos extraños y que busca el encuadre sencillo para recrear una historia sencilla (y un tanto manida). Klein encuentra en el montaje el mejor aliado para dibujar el entorno cotidiano y familiar que ahoga al protagonista por el miedo a perderlo. Permite que la historia respire y esparce sus momentos malickianos por la cinta para aunar la introspección con la acción. A diferencia de lo que ocurre en To the wonder, Saar Klein parte de la acción y de una historia concreta para llegar al fondo del padre de familia protagonista y sus luchas internas. Evita partir de la abstracción pseudofilosófica que escogería Malick y realiza el viaje de fuera hacia adentro utilizando las armas que mejor conoce: la cámara, el plano y, sobre todo, el montaje. Otra cuestión más peliaguda es el argumento. Klein, con la ayuda de Joe Conway, actor y guionista con pocos títulos a sus espaldas, crea un relato en ocasiones torpe y excesivamente explícito en la transmisión de la información de la trama. Por decirlo de algún modo, al guión se le ve el plumero. El esqueleto típico en tres actos está bien construido, pero es demasiado evidente, especialmente en la presentación del personaje y, sobre todo, en cómo lo verbaliza a través del diálogo. Y eso que empieza bien, con un pequeño engaño al espectador mostrándonos una familia perfecta con un padre de familia ejemplar, pero que en realidad está ocultando que le han echado del trabajo y no sabe cómo podrá sostener a su familia. La maduración y el detalle del que hablábamos anteriormente en el montaje se echan de menos en los diálogos, realmente el talón de Aquiles de la cinta.
After the Fall se presenta como la consecuencia del sueño americano mal gestionado. La historia de un padre de familia que prefiere delinquir y esconderselo a su familia antes que renunciar al bienestar de una casa con piscina en el desierto de Nuevo México está repleta de tópicos de las familias estadounidenses de la gran pantalla: no falta el suegro adinerado, ni la mujer ama de casa y sumisa, ni los hijos rubios y adorables que ven al padre como el héroe. Klein y Conway dibujan una especie de Ave Fénix de la América familiar que es capaz de conseguir el perdón de los suyos y de la sociedad (encarnada en su amigo inspector de policia), pero incapaz de perdonarse a sí mismo. Por todo ello, la comparación con Walter White es inevitable. Aunque la situación que les empuja a su ciclo delincuente es diferente, al igual que la actividad al margen de la ley que eligen, su espiral creciente de violencia e ilegalidad es la misma: el momento en el que el personaje se da cuenta de la impunidad de sus actos y la fácil realización de los mismos le lleva a subir el tono de sus aspiraciones y a entrar en una etapa de destrucción que empieza por la estructura familiar y termina por él mismo. Sin embargo, la diferencia entre White y Scanlon, que así se apellida el protagonista de la cinta, también reside en la resolución del conflicto: mientras que en la serie se lleva hasta sus últimas consecuencias, Klein prefiere dejarlo en un término medio y que el castigo resida en el fuero interior del personaje, creando así un extraño happy end . De este modo, White se convierte en un héroe y Breaking Bad en una serie de culto, y Scanlon vuelve a ser un tipo normal y corriente con sus fantasmas y After the Fall una película irregular, que no acaba de calar ni de dejar huella, pero bien trabajada a nivel formal. | ★★★★★ |
Víctor Blanes Picó
redacción Barcelona
Things people do, Estados Unidos, 2014. Dirección: Saar Klein. Guión: Saar Klein, Joen Conway. Reparto: Wes Bentley, Vinessa Shaw, Haley Bennett, Jason Isaacs, W. Earl Brown, Missy Yager, Audrey Walters, Beth Bailey, Aaron Alexander, Crystal Miller. Fotografía: Matthias Koenigswieser. Música: Marc Streitenfeld. Presentación Oficial: Berlinale (Panorama) y SXSW 2014.