Lisa Azuelos no cuenta precisamente con un respaldo incondicional de la crítica o el público. La crónica que realizó (con cierta soltura y agradable afecto) sobre lo que significa ser mujer y adolescente en su comedia LOL, 2008, y la multitud de seguidores que ésta le proporcionó en Francia, quedaron reducidos a pedazos por culpa del absurdo remake americano —con Miley Cyrus a la cabeza del reparto— que la misma directora incomprensiblemente realizó (incomprensible artísticamente hablando, ya que se sobreentiende que fue por acuerdos económicos). Sin embargo, la presencia del magnífico François Cluzet (Pequeñas mentiras sin importancia) y, lo que es más importante, la ausencia de personajes faranduleros, hace que volvamos a darle un voto de confianza a Azuelos que presenta este drama romántico que sigue los pasos de dos, en principio, desconocidos: Pierre y Elsa. Él es un marido y padre ejemplar, ella es una mujer de fuertes convicciones, pero el destino parece que está encaprichado en poner sus sentimientos a prueba y hacerles replantearse todo lo que hasta ahora habían descartado. Un viaje de redescubrimiento personal a través de una mirada melancólica. Junto a Cluzet encontramos a Sophie Marceau (La felicidad nunca viene sola), Alexandre Astier (Pop Redemption) y a la propia Azuelos. El reencuentro (Une rencontre) será estrenada en abril en salas francesas y llegará a España el 1 de agosto.
texto| Alberto Sáez (Dublín)
fuente| Cineuropa