traducción| Gonzalo Hernández y Emilio Luna
Apunten este nombre. Debería ser una de las futuras estrellas del cine europeo. Eili Harboe (Stavanger, 1994), la magnética protagonista del drama teen noruego Kiss Me, You Fucking Moron, demuestra talento y simpatía en cada gesto, en cada frase. Música, interpretación... no hay nada que se le resista.
■ Lo primero Eili, enhorabuena por tu excelente interpretación en Kiss Me, You Fucking Moron. Tu segundo papel en un largometraje. El primero protagonista. ¿Cómo te sentiste antes del rodaje, sabiendo que tu cara sería la imagen del póster de la apuesta juvenil del año en el cine noruego? Algo de vértigo debe dar.
— ¡Muchas gracias! Ante todo, me sentí muy agradecida por que me dieran el papel de Tale. Fue muy surrealista para mí, así que no pensé en ello hasta que me vi a mi misma en el póster por primera vez. Elegí no ver la película antes de la premiere y es algo de lo que ahora realmente me arrepiento. El día del estreno, estaba muy nerviosa y casi con nauseas. Afortunadamente todo fue bien.
■ Supongo que la presencia de Kristoffer Joner, con el que repetías tras Kompani Orheim (2012), hizo las cosas más sencillas. ¿Qué significó para ti compartir tu segunda experiencia en el cine con él? ¿Cómo influyó en un casting tan joven la presencia de un actor de gran prestigio en tu país?
— En el set de Kompani Orheim sólo tuvimos un par de escenas juntos, pero inmediatamente me gustó mucho y estaba muy emocionada por trabajar con él de nuevo. Kristoffer no es sólo un actor que va a un set y te hace una gran interpretación, también quiere lo mejor para todo el que está trabajando con él. Me ha enseñado mucho acerca de la vulnerabilidad en rodaje. Trabajábamos juntos antes de rodar y, es más, él escribió e improvisó la escena en la que Tale baja las escaleras de su cuarto después de una noche dura y se enfrenta a él. Es una persona realmente divertida y tuvo que ser censurado por el director Stian Kristiansen. No había fin a su vocabulario de palabras malsonantes cuando improvisaba.
■ En Kiss Me, You Fucking Moron, das vida a Tale, una chica con carácter que representa una etapa difícil: la post-adolescencia. ¿Cómo te preparastes el personaje? ¿Tu edad facilitó las cosas?
— Esto fue un proceso creativo muy diferente del de Kompani Orheim. Ambos, yo y Øyvind, que interpreta a Vegar, fuimos incluidos desde el principio y tuvimos la ventaja de leer el primer borrador del guión. En ese punto, fuimos capaces de relacionarnos con nuestros personajes de una forma muy fuerte. Incluso tuvimos la oportunidad de contribuir en los diálogos y ver cómo se desarrollaba la trama. En muchas cosas, la personalidad de Tale se parece bastante a la mía, pero en otras no. Cuando estoy enamorada, voy a por ello, de cabeza y a veces hago el ridículo, pero siento que Tale es un poco débil cuando se trata de aprovechar la oportunidad, aunque entiendo su dilema y al final se arriesga.
■ Interpretas y también cantas un tema, If i ever, en el filme. Estupendamente, por cierto. Si te dan a elegir, ¿qué prefieres? ¿Carrera como cantante o cómo actriz? Supongo que te formastes para ambas facetas.
— ¡Muchas gracias! La canción If i ever está escrita y producida por Frode Johannessen, quién también realizó gran parte de la música de la película. Tiene mucho talento y fue fantástico trabajar con él. Disfruté mucho cantando y me gustaría continuar haciéndolo pero espero poder trabajar como actriz en el futuro.
■ En la película, lideras a un grupo de amigos que forman un teatro amateur. ¿Te ves como actriz de teatro en el futuro? ¿Dónde te sientes más cómoda, en el escenario o delante de una cámara?
— Empecé en un pequeño grupo dramático en Stavanger cuando tenía 7 años, así que era algo con lo que podía relacionarme. El teatro y el cine son dos cosas totalmente diferentes. Ambos, la interpretación y el proceso creativo. Quiero seguir haciendo ambos pero prefiero el cine.
■ ¿Qué tipo de cine sueles ver, habitualmente? En que actores o actrices te han influido a lo largo de tu vida. En cuanto a la música ¿Qué suena en tu Ipod?
— Me encantan los dramas oscuros con giro. Mi película favorita es Mulholland Drive de David Lynch y me gustó muchísimo la película danesa La caza. Ahora mismo estoy viendo muchas series de televisión como House of Cards, True Detective, Arrested Development y Mad Men. Una película totalmente diferente a lo que estoy habituada a ver es Superbad. Es fantástica y muy divertida. Siempre he escuchado a Kate Bush, mi artista favorita de todos los tiempos, pero también me gustan The Smiths, Craft Spells, Wild Nothing, Sigur Ros, Radiohead y algo de hip hop de la vieja escuela tipo The Notorious B.I.G. Me encanta bailar a Disclosure.
■ Volviendo a la película. Se aprecia una gran química con tu compañero Øyvind Larsen Runestad (Vegard). ¿Habíais trabajado juntos antes?
— Somos completamente diferentes, pero Øyvind es un gran chico. Trajo muy buena energía al set y a día de hoy somos buenos amigos. Nunca había trabajado con él antes. Él es actor en el teatro local así que en la película realmente tuvo que pretender que no se sabía sus líneas. En la realidad es el mejor memorizándolas.
■ Hablando de trabajar. ¿Qué planes tienes en el futuro? ¿Tienes algún nuevo proyecto? Si tuvieras que elegir un director con el que trabajar ¿Con quién te gustaría? ¿Conoces el cine español?
— Intenté entrar en la Academia de Artes de Oslo, la Academia de Teatro, el año pasado pero no pude, así que mi plan es volver a intentarlo este año y esperar que mi suerte sea mejor esta vez. Tengo algunos nuevos proyectos en marcha, pero muchos de ellos aún están esperando por financiación. Es realmente caro hacer una película en Noruega. Kiss me, you fucking moron es lo que se llama una película de bajo presupuesto, y el presupuesto fue de 1,9 millones de euros. Me encantaría trabajar con David Lynch. Mis películas españolas favoritas son El laberinto del fauno y El orfanato.
■ Qué opinas de la salud del cine de tu país. Joachim Trier, en una entrevista, nos comentaba que la industria cinematográfica noruega va creciendo lenta pero segura. Con mucha libertad y sin atender a reglas. Trier pensaba que en diez años habría una industria fuerte que haría frente a Dinamarca y Suecia.
— Estoy de acuerdo con Joachim Trier. Creo que tiene un gran potencial y que hay mucha gente con grandes ideas en Noruega, pero también pienso que aún tenemos mucho que aprender. Espero que en el futuro sigamos retándonos a nosotros mismos, tanto con la elección del tema como en el aspecto técnico, como la fotografía por ejemplo.
■ Lo que sí estamos seguros es que tu futuro será brillante. Muchas gracias por atendernos.
— ¡Muchas gracias!☺