Ópera prima de Adriano Salgado y Premio al Mejor Largometraje en el 28 Festival Internacional de Cine de Mar de Plata, La utilidad de un revistero es dinamita contra convencionalismos cinematográficos. Bajo la advertencia previa de que el filme se trata de un plano secuencia, grabado desde un punto fijo y dentro de un único espacio por tanto, el trailer ya supone un claro manifiesto de intenciones. Nada de spoilers con escenas de la cinta. Tan solo un escenario vacío y texto para fomentar la curiosidad e invitarnos a descubrir en qué diantres consiste la utilidad de un revistero. Porque ¿qué puede tener que ver esa pregunta con una entrevista de trabajo entre una profesional del teatro y una aspirante a escenógrafa? Puede que mucho cuando dicho encuentro se filma bajo un dispositivo más cercano al teatro en el que el atrezzo cobra vital importancia. Y es que lo mejor de la necesidad siempre fue hacer de ella virtud. La puesta en escena de esta película, reducida a un minúsculo set y a un encuadre tan ajustado, se recicla y revaloriza, no solo subrayando el guión, sino también sorteando las limitaciones a través de recursos tan simples pero tan bellos como el juego con espejos. Salgado reflexiona así sobre los mecanismos del cine, herramientas a las que precisamente la película renuncia, dejando en los paladares un indudable sabor a metacine.
Fuentes| Festival de Mar del Plata & Cine Maldito
Texto| Amalia González Jiménez.