PRESAS Y CAZADORES
crítica de Head (3x09) | American Horror Story: Coven (Temporada 3)
FX | EEUU, 2013. Director: Howard Deutch. Guión: Tim Minear. Creadores: Ryan Murphy & Brad Falchuk. Reparto: Sarah Paulson, Taissa Farmiga, Frances Conroy, Evan Peters, Lily Rabe, Emma Roberts, Kathy Bates, Jessica Lange, Gabourey Sidibe, Jamie Brewer, Angela Bassett, Patti Lupone, Josh Hamilton, Alexander Dreymon, Leslie Jordan, Robin Bartlett, Bill Martin Williams, Mike Colter. Fotografía: Tom Houghton. Música: James S. Levine.
Fiona devuelve la cabeza de Delphine a Marie Laveau. Hank regresa al cuartel general de los cazadores de brujas. Cordelia recupera la visión. Luke se entera de un oscuro secreto de su madre. Queenie intenta sensibilizar a LaLaurie. Myrtle se venga del Consejo.
Antes de comenzar un parón de invierno de tres semanas, American horror story: Coven tenía que despedirse por todo lo alto. Y así lo ha hecho. Con otro socavón de la trama, que pone en perspectiva la amenaza del cazador de brujas y amplifica su alcance y seriedad. Resulta que Hank es el heredero de una corporación internacional de cazadores de brujas. Una empresa con su edificio de oficinas y sus negocios en bolsa, ese tipo de corporación. Y por supuesto, Hank es el heredero desnortado, celoso de la mano derecha de su padre, que es en realidad el hijo que nunca tuvo. Porque Hank ama a Cordelia, su tapadera ha terminado por hacerse realidad. La clásica historia, pero pasada por el filtro American horror story. Con trasplante de ojos y vudú. Y perras defensoras llamadas Endora, como la madre de Embrujada (1964-1972).
La Corporación no es la única idea divertida de este episodio, apropiadamente titulado Head. Como tortura a Delphine, que recordemos es inmortal, Marie le cortó la cabeza y la envió por correo a la mansión. Fiona devuelve el paquete y hace una oferta a Marie. Una oferta que resuena durante todo el episodio, y que de hecho es la que sirve de cierre de la temporada. Volviendo a la cabeza, Marie ordena a Queenie que la queme, pero la muñeca vudú tiene otros planes. Un poco de educación cívica. Delphine LaLaurie va a ver Raíces (1977), la miniserie por excelencia sobre la esclavitud. Aun siendo un tema muy serio, uno no puede sonreír ante la idea de una cruel racista de pleno siglo XIX viendo Raíces. Quizá sea por la inherente comicidad de ver la cabeza de Kathy Bates cantando Dixie. La relación entre Delphine y Queenie se ha acabado convirtiendo en una de las mejores de la serie.
De vuelta a la mansión, Fiona está recuperada al 100% -por el momento- y ejerce su función como Suprema. Las brujas están amenazadas, así que su líder, la más poderosa, está tomando cartas en el asunto. Descubre y arregla un poco a Kyle, convirtiéndolo en el nuevo perro guardián de la mansión. Zoe, Nan y Madison tienen horarios; Misty y Cordelia trabajan juntas y Myrtle, que ardió en la hoguera por culpa de Fiona, se está vengando. Haber muerto ha cambiado a la estrafalaria bruja, que ha decidido empezar a actuar por impulsos, no dejándose llevar por lo que está bien o mal. Gracias a su sangrienta ayuda, Cordelia recupera la vista, pero pierde con ello su poder de visión. Hablando de poderes, la telepatía de Nan sirve en este capítulo como enlace entre un comatoso Luke y Joan, que debe aceptar la ayuda de las jóvenes brujas. Si pensábamos que la visión de Joan iba a cambiar tras ser resucitada por Misty en el último capítulo, estábamos equivocados. La serie revela que existe un Dios, pero que la señora Ramsey no sigue bien los mandamientos. Dios le cuenta a Luke que su madre asesinó a su padre. Eficaz solución formal el no usar una voz en off, sino tener a Alexander Dreymon en escena con Jamie Brewer y Patti Lupone.
Bajo la batuta de Howard Deutch, primerizo en esta serie, el episodio fluye entre cámaras que giran sobre sí mismas y planos cargados de aire. La marcada visión que el director/productor Alfonso Gomez-Rejon imprimió es ya la única opción, y como toda apuesta arriesgada a veces funciona y a veces no. En Head funciona para documentar el tiroteo que cierra el capítulo, cuando un derrotado Hank decide eliminar a la gente de Marie Laveau y entra armado hasta los dientes en su peluquería. Tras eliminar a su aquellare, Hank se dispone a matar a la bruja vudú, pero la intervención de una malherida Queenie la salva. Usa su poder para volarle la cabeza al cazador de brujas, quizá a expensas de su propia vida. Todavía no lo sabemos. La única certeza cuando llega el desenlace es que ambos aquelarres se unen contra su gran enemigo: la Corporación. ★★★★★
