Entrevista | Destin Cretton, director de 'Short Term 12'

fecha| domingo 20 de octubre, Valladolid.
entrevista| Álvaro Martín.

Destin Cretton, apunten su nombre porque va es un firme candidato a próximo director de moda, si no lo es ya. Con sólo dos películas en su currículum (I’m not a Hipster y Short Term 12) ha demostrado un talento más que suficiente para dar que hablar en los próximos proyectos en los que se introduzca.

Llega puntual a su cita, vestido de manera cómoda y sencilla, acorde al carácter que delatan sus rasgos hawaiianos. Huye de la pomposidad que suelen lucir muchos directores. Es reflexivo, se toma su tiempo en contestar cada una de las preguntas, mide sus palabras antes de abrir la boca. Aunque parezca mentira dicho lo anterior es también una persona que no borra la sonrisa de la cara y que no duda en echarse a reír cuando tiene la menor ocasión.

■ Mi primera pregunta se basa en lo visto hoy en la primera proyección: el largo aplauso final, los vítores, la gran ovación... ¿Por qué crees que la película ha conectado tan bien con el público en este y en los demás festivales en los que se ha proyectado?

(Ríe) Realmente no lo sé. Yo creo que tiene que ver con los personajes, a pesar de que pasan por cosas muy específicas en un ambiente muy específico del que quizás no mucha gente sepa. Pienso que las emociones y los sentimientos que tienen son universales, cualquiera puede conectar con ellos. Además, a pesar de que parece que es una película de algo depresivo y oscuro, tiene también buenos momentos y dosis de humor, es por ello por lo que pienso que la gente se divierte cuando ve esta película.

■ Sí, eso es cierto y de hecho en eso se basa la segunda pregunta que te quiero hacer, me explico: los “autores” americanos, sus películas, tienen normalmente una relación más estrecha con el entretenimiento que los europeos. ¿Crees que es debido a eso el éxito que han cosechado en los últimos años las películas independientes americanas en el viejo continente?

Sí, totalmente.

■ De hecho. en la mayoría de proyecciones de películas europeas no se ve mucha gente joven, sin embargo, en cuanto la es americana, la sala se llena de jóvenes. Pero dime ¿Por qué crees que las películas de autor americanas tienen esa relación con el entretenimiento que no tienen las europeas?

¡Realmente no lo sé! Yo amo el cine europeo, y pienso que en Estados Unidos podríamos aprender mucho más de este tipo de cine, un cine que te hace pensar y que te hace mirar el mundo de una manera diferente. Esta película espero que tenga ese efecto, que haga pensar, que haga ver las cosas de una manera un poco diferente. Pero al mismo tiempo también espero que sea entretenida, que se pueda conectar con los sentimientos de los personajes.

■ Y hablando de algo tan difícil como hacer una película, tú que eres americano, ¿cómo de difícil es hacer una película al margen de las grandes productoras en Hollywood?

Es todo un reto en América. El otro día un cineasta de aquí me contaba lo difícil que se ha puesto en España hacer películas debido a que el gobierno ya no subvenciona nada. El caso es que en Estados Unidos la situación es bastante similar. Al final se trata de encontrar un grupo de gente apasionada por la historia y que deseen trabajar por muy poco dinero o incluso gratis. No hay nadie que regale dinero, se trata de encontrar gente con pasión por tu historia. Además esto a menudo lleva a que el resultado, a que la película, sea mejor. Así se hizo esta película.

■ ¿Financiada por crowdfunding?

No, fue financiada por un productor de Nueva York.

■ ¿Qué le hizo confiar en ti? ¿Leyó el guión?

Sí, de hecho tuvo la mejor actitud posible, leyó el guión y me dijo: “sólo quiero hacer una buena película, me da igual si recupero mi dinero”

■ Eso es una gran actitud.

Sí. Además recuperó su dinero, por lo que está muy feliz (Ríe).

■ Otro tema del que quería hablar es el hecho de que esta película trata un tema complicado e incómodo, sin embargo te has atrevido a contar la historia de una manera simpática y carismática, no como una comedia pero si con elementos pertenecientes a ese género. ¿Cómo de difícil fue trabajar desde el guión hasta el rodaje final con un enfoque en una historia como esta?

El tono de la película fue inspirado por el ambiente real de ese tipo de sitios. Yo trabajé en un sitio así dos años antes de ir a la Escuela de cine y antes de escribir el guión tuve un montón de entrevistas con gente que había trabajado en centros así mucho más tiempo que yo. Y todas las historias que me contaron eran una mezcla: eran historias dramáticas muy intensas pero a la vez inspiradoras e incluso divertidas. Y todas ellas eran completamente reales. Pensé que necesitaba mostrar todo ello para poder mostrar un retrato correcto de ese mundo, porque la realidad es que la gente que trabaja en esos ambientes no recibe mucho dinero, y si todo es oscuro y depresivo, se hace my difícil trabajar, por lo que es necesario pasar a un segundo nivel que de sentido al trabajo y muchas veces son esos pequeños momentos de humor, inspiradores, brillantes los que te limpian. Eso es lo que encontré cuando trabaje allí, fue el trabajo más difícil que nunca he hecho, pero también el más enriquecedor y me lo pasé muy bien.

■ Mucha gente que lee este magazine, como yo por ejemplo, estamos empezando en el mundo del cortometraje, dando los primeros pasitos en este mundillo. Tú fuiste a escuela de cine y después hiciste distintos cortometrajes antes de debutar en el largo (I am not a Hipster), ¿qué tipo de consejos le darías a alguien que está empezando y que quiera llegar a vivir de esto?

Personalmente no creo que sea necesario ir a una escuela de cine. Todo lo que he aprendido lo he aprendido de hacer películas y no de ir a clase. No sé qué decir, yo hice siete cortos importantes antes de mi primer largo, pero antes de ello hice un montón de cortos y me alegro de haberlo hecho, porque pienso que cada corto me enseño algo nuevo y que realmente me ayudaron a prepararme para hacer un largo. Eso quizás valga como consejo. La verdad es que pienso que es difícil dar consejo porque la mayoría de las veces que la gente me ha dado consejos diciéndome qué hacer ha resultado que al final no era lo más adecuado para mí. Pienso que hay demasiadas variables, la mayoría basadas en quién eres, cuál es tu personalidad, qué te gusta, cómo ves las cosas. cada persona es distinta, es muy difícil dar un consejo que valga para todo el mundo. En el fondo, yo personalmente siempre he querido encontrar un modo de seguir haciendo películas porque lo adoro, no por dinero o por fama, sino porque adoro el proceso. Así que me da igual hacerlo con una cámara casera o con amigos o sin dinero, cueste lo que cueste, lo importante es seguir con ese proceso por ninguna otra razón más que por amor al cine. Pienso que si esa es tu motivación nunca vas a estar decepcionado.

■ Para ir acabando, he visto que has viajado a un sinfín de festivales y que después de Seminci marchas a Abu Dhabi. ¿Por qué crees que festivales de cine como este son importantes para pequeñas películas como las tuyas?

No sólo son importantes, son también necesarios para la supervivencia del cine independiente. Normalmente las películas pequeñas no tienen dinero para marketing o anuncios, normalmente no tienen grandes estrellas, los festivales son muchas veces la única manera de mostrar su películas determinadas películas al público. Personalmente yo he aprendido mucho de mi arte gracias a ir a festivales y ver como distintas culturas reaccionan de manera diferente a mis películas. Todo eso es muy importante para mí a nivel personal, pienso que he aprendido mucho.

■ ¿Cuáles han sido las principales influencias de esta película?

Ha habido varias influencias bastante obvias: La película americana independiente "Half Nelson", hecha en el año 2006 antes de que Ryan Gosling se convirtiera en una estrella. La película francesa "La clase", que me interesó mucho por el proceso de cómo fue hecha, de manera improvisada y por chicos pequeños, daba un resultado muy real, muy autentico. También he sido influenciado por el cine documental, específicamente por el director americano Steve James. Tiene un documental titulado "Hoop Dreams" y otro titulado "Stevie", en ambos hay verdaderos elementos de tragedia pero no llegan a caer en el cinismo, están por encima de todo eso, hay mucha esperanza en ellos, a pesar de que no son un retrato perfecto del mundo por todo el mal que muestran, enseñan también esperanza por encima de todo, y pienso que eso es algo que conecta perfectamente tal y como quería con esta película.