NUESTRO LUGAR EN EL TIEMPO
crítica de Safety Not Guaranteed | Colin Trevorrow, 2012.En más de una ocasión, el cine independiente ha utilizado el género de la ciencia ficción –más asociado siempre a filmes de grandes presupuestos– para basar la anécdota argumental de historias más intimistas, donde el mayor protagonismo lo tienen los personajes y sus conflictos sentimentales. En aquel maravilloso romance de Michel Goldry titulado ¡Olvídate de mí! (2004), Jim Carrey y Kate Winslett se sometían a un innovador experimento donde hacían borrar de su memoria cualquier atisbo de recuerdo de su relación amorosa. En otra joya indie, The Man From Earth (2007), de Richard Schenkman, la increíble experiencia de un hombre de 14.000 años es contada de manera teatral y minimalista, atrapando la atención del espectador sin necesidad de abandonar las cuatro paredes de su único escenario. El cine patrio también ha usado el cine de invasiones alienígenas como excusa para mostrarnos una incipiente historia de amor en la discutida Extraterrestre (2011), de Nacho Vigalondo. Con Safety Not Guaranteed (2012) encontramos un nuevo artefacto romántico que utiliza, en esta ocasión, el atractivo tema de los viajes en el tiempo como MacGuffin sobre el que se construye la trama.
La historia de Colin Trevorrow se inspira en un anuncio clasificado que un empleado de la revista Blackwoods Home Magazine publicó a modo de broma. En la película, tres jóvenes escritores de una revista de investigación deciden investigar el caso del enigmático anuncio en el que se busca un socio con el que emprender un viaje en el tiempo. La melancólica Darius, el irreverente Jeff y el ingenuo Arnau descubren que el autor de semejante petición es Kenneth, un marginado trabajador del supermercado del pueblo que asegura haber encontrado la manera de moverse a través del tiempo. Darius intenta acercarse a él, ofreciéndose para ser su compañera de viaje, con el fin de sacar la información necesaria para su artículo. Conforme la relación entre ambos se va estrechando, Darius comienza a sentirse atraída por la encantadora personalidad de Kenneth y su escepticismo inicial respecto a la autenticidad del descubrimiento científico de éste, se irá disipando. Tal vez esté ante un verdadero avance para la Humanidad y Kenneth no esté tan loco como sus amigos piensan. Básicamente, el filme transcurre plácidamente sobre dos líneas argumentales –la relación profesional y sentimental entre Darius y Kenneth y la búsqueda de Jeff de una antigua novia del instituto a la que acaba de reencontrar a través de Facebook–, dejando los apuntes fantásticos en segundo plano.
El inteligente –y mucho más complejo de lo que pueda parecer a primera vista– guión del debutante Colin Trevorrow nos habla de la búsqueda de la felicidad y de cómo el ser humano suele asociarla a volver a algún momento atrás en el tiempo donde las cosas comienzan a torcerse y así poder cambiar el triste presente. Aquí no se ha creado una máquina del tiempo para poder salvar el mundo de un cataclismo o viajar a la época en que los dinosaurios poblaban la Tierra, sino que es la herramienta para corregir los errores del pasado y recuperar a un amor perdido. El tratamiento que Trevorrow le da a sus personajes es exquisito. Se nota a la legua que ama a sus criaturas y traslada esa empatía al espectador que, rápidamente, se encariña con estos entrañables frikis. Unos actores en estado de gracia y perfectos en sus papeles, terminan de redondear la jugada. Mark Duplass, el descubrimiento de la encantadora El amigo de mi hermana (2011), de Lynn Shelton, está estupendo en el rol del soñador Kenneth, todo un geek seguidor de la saga Star Wars –que aparece mencionada en varios momentos de la película– y obsesionado con reconquistar a una chica de la que no sabe nada desde hace 10 años. Aubrey Plaza, que ya despuntó en Damiselas en apuros (2011), de Whit Stillman, demuestra ser una de las actrices más interesantes del nuevo cine independiente americano, con una belleza muy particular. La perfecta complicidad entre Duplass y Plaza es el verdadero secreto para que Safety Not Guaranteed funcione como un reloj en su registro romántico. El apartado humorístico de la cinta, no obstante, está cubierto con gran acierto por Jake Johnson y el indio Karan Soni, que forman una pareja cómica ciertamente simpática. El único rostro verdaderamente popular de la cinta lo encontramos en Kristen Bell, la protagonista de la serie Verónica Mars, en un papel secundario pero clave para entender las verdaderas circunstancias del personaje de Kenneth.
Safety Not Guaranteed supone un auténtico soplo de aire fresco en el cine independiente de los últimos años. Una muy agradable sorpresa que ha sido reconocida en multitud de festivales con diversos galardones. El guión, además, fue justamente premiado en los Independent Spirit Awards y en Sundance 2012. También acaparó excelentes críticas en su paso por el Festival de Sitges. Estamos ante una película pequeña en presupuesto –menos de 1 millón de dólares– pero grande en corazón e ideas, que demuestra una vez más que con talento se puede hacer grandes cosas sin necesidad de despilfarrar el dinero en efectos especiales. No hay que dejarse llevar a engaño. Safety Not Guaranteed no es Regreso al futuro (1985), de Robert Zemeckis, ni falta que le hace. Ambas juegan en diferentes ligas. La obra de Trevorrow no es un espectáculo de acción y aventuras para grandes audiencias. Es una tierna, gratificante y original comedia romántica, cuya historia de amor entre dos personajes inadaptados y excéntricos supone el mayor placer de su propuesta. ¿Acaso no fue la fabulosa química entre Scott y Ramona Flowers lo más atractivo de la magnífica Scott Pilgrim contra el mundo (2010) por encima de su llamativa estética?. Gracias a Dios, existen algunos nombres independientes que están demostrando gran sabiduría al descubrirnos que es posible un cine fantástico alternativo del que pueden surgir pequeñas grandes historias capaces de tocar la fibra sensible del público sin insultar su inteligencia. Hollywood se ha percatado de la valía de Colin Trevorrow y su nombre ya suena para dirigir la cuarta entrega de Parque Jurásico. Ojalá no termine vendiéndose como tantos otros. ★★★★★
José Antonio Martín.
crítico de cine.
Estados Unidos. 2012. Título original: Safety Not Guaranteed. Director: Colin Trevorrow. Guión: Derek Connolly. Productora: Big Beach Films/Duplass Brothers Productions. Localización principal: Washington. Presupuesto: 750.000 dólares. Recaudación en USA: 4.007.792 dólares. Fotografía: Benjamin Kasulke. Música: Ryan Miller. Montaje: Joe Landauer, Franklin Peterson. Intérpretes: Aubrey Plaza, Mark Duplass, Jake Johnson, Karan Soni, Mary Lynn Rajskub, Kristen Bell.
tema final del filme | Big Machine, de Ryan Miller.