Hoy hace 155 años nacía Abraham Stoker. Un novelista irlandés que pasó a la posteridad gracias a su novela ‘Drácula’ publicada en 1897. Con él nacía un mito proveniente de leyendas paganas del este de Europa – Vlad Draculea – y que sigue vigente en nuestros días. Solo hay que ver la cosecha audiovisual de la última década. El vampiro se ha convertido, más allá del terror, en un símbolo romántico que conecta con el público con ese término cliché llamado el amor eterno y que no entiende de modas y temporadas. Stoker, que acabó engullido por su propio personaje, recibió numerosos elogios por parte de la crítica contemporánea pese a su estilo bastante convencional. Su final lleno de deudas contrasta con el auge de hoy de uno de los iconos artísticos del siglo XXI. Francis Ford Coppola fue el autor que más se acercó a la esencia del escritor de Crontarf con su versión de 1992. El resto, sucedáneos adaptados a las tendencias anuales. Algo de lo que buscará huir el surcoreano Park Chan-wook en su primer proyecto en tierras americanas titulado ‘Stoker’.
Articulado bajo el libreto de Wenworth Miller (Prison Break) – incluido en la Black List de 2010 como uno de los mejores guiones aun sin filme asociado –, ‘Stoker’ omite elementos vampíricos y se centra en el atmósfera de la prosa original. Nicole Kidman, Matthew Goode y Mia Wasikowska encabezan esta historia de suspense con reminiscencias de ‘La sombra de la duda’ (Shadow of a Doubt, 1943), de Alfred Hitchcock. El primer paso del cineasta asiático parece arriesgado al igual que sugerente. Su estreno está programado para el 01 de marzo en Estados Unidos. A continuación, el primer tráiler y póster.