The Possession (El origen del mal) (Ole Bornedal, 2012)
Columna para El Periódico Extremadura
The Possession (El origen del Mal, 2012), un título que no sugiere nada, salvo hastío y desgana, pero que esconde una serie de detalles interesantes. El primero es su director, el danés Ole Bornedal, firmante de cintas independientes como ‘El vigilante nocturno’ (1994) o ‘Deliver us from devil’ (2009) y que tuvo ya un flojo debut en terreno americano con ‘La sombra de la noche’ (1997). ¿Cómo un ‘auteur’ escandinavo termina realizando terror de bajo coste en Estados Unidos?
Dinero pensará la mayoría. Sin embargo, Bornedal otorga a este terrorífico filme (es innegable, se pasa miedo) un envoltorio diferente que se aleja levemente de lo comercial y nos introduce en las entrañas del dolor, la duda y el horror. La realización es innovadora y cada encuadre está soberanamente estudiado. No será la película que más se recuerde de su filmografía pero sí una buena muestra de cómo cambiar las reglas del extinto modelo establecido.
El segundo detalle proviene de su trama. El enfoque judío recubre, por momentos, de manera original su aséptica y tópica trama. No es que sea un ejercicio extremo de articulación narrativa pero al menos consigue que el espectador se sienta incómodo y curioso ante todos los sucesos que están por llegar. Y, cuando parece que se asiste a algo distinto, vuelta al estereotipo.
Sustos, clichés, personajes hieráticos (unos desaprovechados Jeffrey Dean Morgan y Kyra Sedwick), sangre, violines desafinados y más sustos. ‘The Possession’ es una cinta que bebe todo lo poco bueno que nos deja el género pero que no aturde ni deja huella. Al menos en nuestra consciencia. De todas formas, no miren debajo de la cama esa noche.
Puntuación: 4|10.
Publicada el domingo 15 de septiembre.
Emilio Luna.
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