Soul Surfer, enésimo tratado de superación, basada en hechos reales |
TODO UN MANUAL DE SUPERACIÓN
Bethany Hamilton, una joven hawaiana de ahora veintidós años, es todo un ejemplo de deportista. Desde pequeña demostró un don para moverse entre las olas hasta convertirse en una de las líderes femeninas de ese mágico deporte llamado surf. Pero su historia va más allá de una tabla y una cresta, el 31 de Octubre de 2003 –con solo trece años– fue atacada por un Tiburón Tigre (Galeocerdo Cuvieri) perdiendo un brazo. Un terrible hecho que, sin embargo, no frenó su determinación y vigor.
La historia de Hamilton ya apareció en la pantalla con el cortometraje de Becky Baumgartner The Heart of Soul Surfer (2007); ahora adopta el formato de filme con Soul Surfer (2011), novena película del impersonal cineasta Sean McNamara. Un director, responsable de creaciones como Cásper y la mágica Wendy (1998) y Bratz la película (2007), que marca de manera clara cual será la línea del largometraje.
AnnaSophia Robb interpreta a Bethany Hamilton, surfista que sufre un ataque de tiburón |
Soul Surfer es un telefilme de noventa minutos lleno de drama y buenas intenciones. Es más que probable que la ficción sea un fiel reflejo de la realidad pero un relato tan poderoso como este merecía una visión más sutil y profunda. La trivialidad y la lágrima se unen en una producción propia de la sobremesa dominical.
Tan sólo los seis primeros minutos de metraje –con el nombrado ataque del escualo– llenos de tensión y ritmo ofrecen algo diferente junto a la interesante interpretación de AnnaSophia Robb y la banda sonora de Marco Beltrami. Una historia de las denominadas “más grande que la vida” que se perderá en ese gran océano que es el olvido.
Puntuación: -C (5/10)
Publicado el domingo 22 de Abril de 2012.
Por Emilio Luna.
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Críticas para el El Periódico Extremadura.
El antepenúltimo mohicano