Cuna anual del cine independiente europeo, el festival de cine de Karlovy Vary ha celebrado su cuarenta y seis edición. Nueve días (del 01 al 09 de Julio) de producción continental que sirve como escaparate a modestas creaciones. Algo cada vez más evidente con el paso de los años con una apuesta por el perfil bajo frente a los flashes y las clásicas alfombras rojas. El evento checo es uno de los certámenes más antiguos del mundo. Salvo en la guerra fría, donde cogió el testigo Moscú, siempre ha sido considerado el festival de mayor importancia y prestigio de Europa Oriental. Bajo la acogida de la ciudad de la región de Bohemia han saltado a la palestra cintas cómo El Prisionero de las Montañas (Serguei Bodrov, Kavkazskij plennik) en 1996 o Amelie (Jean Pierre Jeunet, Le fabuleux destin d’Amélie Poulain) en 2001. Tradicionalmente, su programación siempre ha tenido un hueco importante para el cine español. Prueba de ello fue la excelente acogida en el curso pasado de La Mosquitera (Agustí Vila), uno de los largometrajes nacionales más interesantes del 2010.
Este año nuestra representante de mayor nombre ha sido la excelente película de Montxo Armendáriz, que competía en la sección oficial, No Tengas Miedo (2011). Junto a ella (en el apartado Forum of Independents), El Alma de las Moscas, dirigida por Jonathan Cenzual y con un presupuesto de mil euros. Ambas han sido recibidas de manera excelente. Al igual que la homenajeada Judi Dench en un reconocimiento a su carrera. Otro galardón más para la veterana actriz británica que a sus setenta y siete años sigue demostrando el por qué es una de las mejores intérpretes europeas de la historia. No fue el único premio otorgado. El tradicional Globo de Cristal que define el triunfador del festival fue a parar a la película israelí Restoration de Joseph Madmony. Drama sobre problemas familiares que se impuso a las otras diez obras a concurso.
Completaron el palmarés: la eslovaca Gypsy (Premio del Jurado); Pascal Rabaté por Holidays by the Sea (Mejor Director); Stine Fischer Christensen por Cracks in the Shell (Mejor Actriz) y David Morse por Collaborator (Mejor Actor). Destacar, además, el premio Netpac a uno de los filmes más destacados de Cannes, Once Upon in Anatolia. Con el listado de ganadores se puso el broche final. Otro año más y de manera anónima, Karlovy Vary deja su impronta de buen cine.
Este año nuestra representante de mayor nombre ha sido la excelente película de Montxo Armendáriz, que competía en la sección oficial, No Tengas Miedo (2011). Junto a ella (en el apartado Forum of Independents), El Alma de las Moscas, dirigida por Jonathan Cenzual y con un presupuesto de mil euros. Ambas han sido recibidas de manera excelente. Al igual que la homenajeada Judi Dench en un reconocimiento a su carrera. Otro galardón más para la veterana actriz británica que a sus setenta y siete años sigue demostrando el por qué es una de las mejores intérpretes europeas de la historia. No fue el único premio otorgado. El tradicional Globo de Cristal que define el triunfador del festival fue a parar a la película israelí Restoration de Joseph Madmony. Drama sobre problemas familiares que se impuso a las otras diez obras a concurso.
Completaron el palmarés: la eslovaca Gypsy (Premio del Jurado); Pascal Rabaté por Holidays by the Sea (Mejor Director); Stine Fischer Christensen por Cracks in the Shell (Mejor Actriz) y David Morse por Collaborator (Mejor Actor). Destacar, además, el premio Netpac a uno de los filmes más destacados de Cannes, Once Upon in Anatolia. Con el listado de ganadores se puso el broche final. Otro año más y de manera anónima, Karlovy Vary deja su impronta de buen cine.