Una de las películas que más me ha impresionado este curso, ha sido Déjame Entrar. El film sueco, ha sido una de las revelaciones, combinando modestia con originalidad y cuyo desenlace no deja indiferente a nadie. Un obra que rinde culto a los mitos vampíricos, muy alejados de la, tan de moda, estética de la saga de Crepúsculo. Todo con una atmósfera muy lograda, unos personajes muy bien perfilados y unos detalles estupendos de su guión. Algunos la tacharán de lenta otra de aburrida, pero es cine europeo, si alguién esperaba acción estilo Taken este no es su film. Estamos ante una cinta, muy cuidada, detallista y que sorprende poco a poco.
Uno de los aciertos, es una prodigiosa banda sonora, compuesta por Johan Soderqvist. Soderqvist, con una carrera casi completa en el cine escandinavo, con películas como Hermanos (Bodre, cuyo remake americano esta muy cercano de estrenarse), solo ha compuesto para un film americano, Cosas que Perdimos en el Fuego. En Déjame Entrar, crea una partitura redonda, con piano y waterphone, y apoya en la narración como una protagonista más. Bellísima, nos trasmite la frialdad de Estocolmo, y supone un fondo excelente, para un cuento que te deja boquiabierto a su fin.
Uno de los temas principales, la pista número tres, "Eli´s Theme", es mi preferido.
Uno de los aciertos, es una prodigiosa banda sonora, compuesta por Johan Soderqvist. Soderqvist, con una carrera casi completa en el cine escandinavo, con películas como Hermanos (Bodre, cuyo remake americano esta muy cercano de estrenarse), solo ha compuesto para un film americano, Cosas que Perdimos en el Fuego. En Déjame Entrar, crea una partitura redonda, con piano y waterphone, y apoya en la narración como una protagonista más. Bellísima, nos trasmite la frialdad de Estocolmo, y supone un fondo excelente, para un cuento que te deja boquiabierto a su fin.
Uno de los temas principales, la pista número tres, "Eli´s Theme", es mi preferido.
Hubo un momento, cercano al final, que sonó una canción de pop, con una voz que sonaba familiar. Efectivamente, es una canción en sueco de Per Gessle, un de los miembros del duo Roxette, icono del pop de los noventa. En definitiva, un score excelente, de una de las películas de este 2009.