Porque nadie dijo que el cine de autor no podía ser divertido
crónica de la segunda jornada de la 58ª Semana Internacional de cine de Valladolid |crítica de Short Term 12, Gente en sitios y PresentimientosMañana fría en la capital del Pisuerga. Primer madrugón del festival, periodistas y acreditados que caminan ojerosos —los primeros por trabajo, los segundos por que la fiesta se alargó— hacia el teatro Calderón, sede principal del certamen. Las caras, lejos de ser amargas, muestran el optimismo propio de los que saben que van a ver una buena película. O eso es lo que dicen las voces que llegan del extranjero, lo cual si nos fiamos, da cierta certeza de que la próxima hora y media no va a ser una hora y media de pelea continúa contra Morfeo. Aunque a estas horas nunca se sabe. Short Term 12 de Destin Cretton, cumplió las expectativas sobradamente. Gran diferencia respecto al año pasado cuando hubo que esperar a la penúltima obra, De óxido y hueso de Audiard para que ver verdaderamente un ejemplo perfecto de lo que debe ser el cine. Aunque la verdad es que como insistía un buen conocido mío al final del pase, no se puede poner una cinta tan buena la primera, que deja el nivel muy alto y luego pasa lo que pasa, porque claro, aunque las comparaciones son odiosas son inevitables. Después tuve mañana de entrevistas, con Destin Cretton, director del trabajo que aglutinó todos los elogios del día, Mar Coll, que inauguró el festival, y Juan Cavestany, que presentaba hoy Gente en sitios en la sección de cine español. Ni que decir tiene que las entrevistas las podéis leer aquí, en El Antepenúltimo Mohicano, los próximos días. El caso es que después de la ajetreada mañana pude disfrutar de la gamberra obra de Cavestany y por último de la película de Santiago Tabernero Presentimientos, que concursa en sección oficial. Vamos con las críticas.
SHORT TERM 12
de Destin Daniel Crettonintérpretes: Brie Larson, John Gallagher Jr., Kaitlyn Dever, Rami Malek, Keith Stanfield, Kevin Hernandez, Melora Walters.
Estados Unidos, 2013 | Cinedigm
Sección Oficial
Por una vez, y sin que sirva de precedente, déjenme empezar por el final, ese momento en el que la imagen se funde a negro y empiezan a salir los créditos. Ese momento que parecía tan lejano, y que sin embargo da la sensación de haber llegado demasiado pronto. La cinta de Destin Cretton deja con hambre de más, de mucho más, es disfrutable desde el primer minuto hasta el último, es lo más cercano que un ser humano del 2013 puede estar en viajar los 96 minutos que dura al futuro. Todo esto me dirán, se puede decir de muchas entretenidas películas, pero es que aquí hay mucho más: hay emociones, hay sentimientos, hay pasión, hay un muy buen guión de alguien que sabe cómo se cuenta una historia y sobretodo, cómo se rueda. La trama gira en torno al centro Short Term 12, un hogar de acogida para adolescentes en situación de vulnerabilidad. Allí son atendidos por un grupo de jóvenes monitores que se encargan de darles el amor que les fue rechazado de nacimiento. Allí trabaja Grace, la principal protagonista, una dulce joven que se acaba de quedar embarazada de su novio, también trabajador del centro, y que como una buena madre da todo lo que tiene a “sus hijos” sin pensar en ella misma, víctima durante su niñez del maltrato de su padre.
El largometraje trata el tema sin ningún cinismo, sin ninguna morbosidad y con una sinceridad que a más de uno le resultará esclarecedora con el inicio y las divertidas bromas y anécdotas que comparten los monitores en él. No estamos ante una comedia, pero es innegable que este drama tiene elementos propios del “género menor”. Cretton demuestra que no hay historias felices ni historias tristes, que no se puede ser eternamente triste ni eternamente feliz, que la realidad es mucho más compleja que esa simplificación que nos enseñan de pequeños con las fábulas y los cuentos de hadas. La vida es una sucesión continua, dialéctica e imparable de momentos felices y de momentos tristes, eso es algo inevitable. Son los pequeños e imprevisibles estallidos en las rutinas de jóvenes, como los que muestra la película, los que dirigen sus estados anímicos y acaban determinando el rumbo de sus vidas. El azar, o llamémoslo la determinación con la que se nace es el condicionante principal que pesa en la mayoría de estos pobres desgraciados que conviven en Short Term 12 para aprender a ser felices dentro de esta paradoja. Esa sea quizás la principal lección que Cretton nos da, la aceptación total de esa dualidad vital. Estéticamente Short Term 12 es magnifica, con una cuidada fotografía y un oportuno y adecuado uso de la música la llevan a presumir en su globalidad de esencia indie como estilo, como marca. Sería curioso enumerar lo mucho que comparte Cretton con sus “compatriotas independientes” Kelly Richard, Jonathan Levine o Jeff Nichols. En definitiva, estamos empezando el festival y ya puedo decir sin duda alguna que el rumor se ha confirmado, los profetas tenían la razón, Short Term 12 es uno de los grandes títulos de esta edición, y una perfecta candidata a alzarse con la Espiga de Oro. ★★★★★ crítica de Short Term 12, por Ignacio Navarro (Sarajevo).
GENTE EN SITIOS
de Juan Cavestanyintérpretes: Ernesto Alterio, Carlos Areces, Raúl Arévalo, Luis Bermejo, Jorge Cabrera, Antonio de la Torre, Irene Escolar, Coque Malla.Fotografía.
España, 2013 | Apaches Entertainment
Spanish Cinema
Uno de los títulos más llamativos que llegaban al festival, una obra estrenada en Toronto y que después de haber recorrido medio mundo se presentó en San Sebastián y Sitges. Tuve la suerte de entrevistar a Cavestany por la mañana, antes de ver su trabajo, y me definió a éste como: “un parque de atracciones barato en el que pasan cosas todo el rato”. Después de verla no puedo estar más que de acuerdo con su sentencia, sólo que me sabe a poco, imagínense que ese parque de atracciones barato lo dirigen los mismísimos Monty Python en plena crisis mundial. Cavestany ha ejercido de director total (escribe, dirige, graba, monta), es con esta peli uno de los mayores autores que ha pisado la Seminci en décadas, en estos tiempos tan difíciles puede presumir de haber hecho exactamente la película que quería hacer. Y ahora, después de darle algo de jabón quizás toque hablar de la cinta para que puedan comprenderme. Estamos hablando de un filme sin presupuesto, una película en la que nadie ha cobrado, grabada con una de esas cámaras de video que se llevan los turistas que viajan a Paris y con la interpretación, aquí viene lo impactante, de casi ochenta actores, la mayoría grandes conocidos como Maribel Verdú, Antonio de la Torre, Santiago Segura, Eduard Fernández, Coque Malla o Juan Antonio Quintana entre otros.
El fime está formado por un conjunto de casi treinta escenas que deben ser vistas no como independientes sino como relacionadas entre sí por nexos que el espectador debe ir desentrañando a medida que avanza el metraje. Resulta además una mezcla de géneros en una progresión de una sencillez que descoloca, de comedia a drama, de drama a Thriller, de thriller a falso documental etc. Y la verdad es que es una genialidad, es desternillante, es gamberra, es atrevida, y por encima de todo, es profunda. No hay nada gratuito, se ofrece a revisionado antes incluso de que haya acabado. Guardan además la mayoría de sus escenas una reflexión filosófica que subyace al absurdo y divertido sketch que nos estén interpretando los actores que la protagonizan, característica que sin duda emana de aquel pionero en el humor absurdo existencialista del circo volador de los Monty Python. Todo ello al servicio de una naturalidad de alguien que ha disfrutado rodando su propia película, un proyecto que con medios profesionales más convencionales no tendría ni la magia, ni el encanto ni la frescura que ahora desprende. ★★★★★
PRESENTIMIENTOS
de Santiago Tabernerointérpretes: Eduardo Noriega, Marta Etura, Alfonso Bassave, Irene Escolar.
España, 2013 | Tornasol Films
Sección Oficial
La última película que he visto hoy venía firmada por Santiago Tabernero y Eduardo Noriega, doblemente vinculados a la cinta, primero como escritores del guión, después como director y actor principal respectivamente. El filme trata la historia de un matrimonio joven, bebe incluido, que pasa por un momento delicado. El amor parece que se marchitó hace tiempo y sólo queda rutina y tedio. Es por ello por lo que deciden ir a pasar unas vacaciones a Elche para volverse a enamorar, para volver a empezar. El verdadero argumento empezará cuando ella, una notable (como siempre) Marta Etura, tenga un accidente de tráfico que la deje en coma. Él se volcará entonces en ella mientras ella, en el mundo perdido de la mente, lucha por salir a la superficie para volverse a encontrar con él.
El principal problema es que Tabernero no parece comprender el caos y la locura que es la mente humana, o no lo comprende o parece querer simplificarla. Plantea por lo tanto un muy lineal y causal mundo interior de la mujer en coma. Un universo, que al menos está cargado de ciertos simbolismos (y de un cameo espléndido de Russian Red) pero que a pesar de ello está años luz de cualquier similitud lynchiana. No hay locura dentro de la mente de la joven, todo está calculado, todo tiene cierto sentido, ella no es más que una pasajera que viaja por un mundo interior no tan desconocido mientras escucha las voces que su marido le susurra en el oído de su cuerpo en coma, Una influencia innegable de Eternal Sunshine of the Spotless Mind (Olvidate de mí) combinada con dosis de Hable con ella. El caso es que Tabernero tiene la pretensión de contarnos un interesantísimo thriller, pero se queda en un simple drama amoroso. Un buen thriller debe crear suspense, debe plantear todo tipo de inseguridades, debe estar centrado en un presente en el que no sabemos qué es lo que les va a pasar a los personajes. Los flashbacks, por lo tanto, como acciones resueltas del pasado que son, no crean suspense, y la mente de una persona que está dormida contrapuesta a la quietud del mundo real y seguro en el que reside tampoco. Mención aparte va para el innecesario personaje del anciano del hospital, que no se sabe muy bien que pinta en la historia y que parece estar de paso constantemente. La película por lo tanto un intento frustrado, y aunque sea innegable que es entretenida, está bien hecha y tiene una fotografía digna de alabanza (sobretodo en las escenas del bar) como resultado es un producto condenado a desaparecer de la memoria de los espectadores ¿Por qué? Porque los americanos lo hacen igual pero más rápido y con algún disparo. ★★★★★
Álvaro Martín
redacción Valladolid | enviado especial a la 58ª Semana Internacional de Cine de Valladolid
La protagonista de hoy: La por (El miedo)|
